Redacción EC

, la capital peruana, se sitúa entre las cinco ciudades más costosas de para adquirir un departamento, según los resultados del más reciente Relevamiento Inmobiliario de América Latina (RIAL). ¿Qué otras ciudades se encuentran dentro de esta lista? En la siguiente nota te contaremos lo que debes saber respecto a este tema que ha llamado la atención de más de una persona.

ADEMÁS DE LIMA, CUÁLES SON LAS OTRAS CUATRO CIUDADES DE SUDAMÉRICA DONDE ES MÁS CARO COMPRAR UN DEPARTAMENTO

Montevideo, la capital de Uruguay, ha sido identificada como la ciudad más costosa para comprar un departamento en Sudamérica, según los resultados del Relevamiento Inmobiliario de América Latina (RIAL), realizado por el Centro de Investigación de Finanzas (CIF) de la Escuela de Negocios de la Universidad Torcuato Di Tella en colaboración con Zonaprop.

Con un precio por metro cuadrado de US$3.166, Montevideo supera a otras ciudades de renombre en la región, incluyendo Santiago, Río de Janeiro, Buenos Aires y Sao Paulo.

En este estudio, Lima se encuentra en quinta posición.

De esta manera, se resalta la dinámica del mercado inmobiliario en estas ciudades, revelando que el costo por metro cuadrado de estas zonas latinoamericanas ha alcanzado niveles que compiten con algunas de las urbes más caras del continente.

CUÁLES SON LAS 5 MEJORES CIUDADES PARA VIVIR EN LATINOAMÉRICA

En la última edición de su estudio anual sobre las condiciones de vida en diferentes ciudades del mundo, la revista The Economist ha destacado las 5 mejores ciudades para vivir en Latinoamérica en el año 2023.

En primer lugar, Buenos Aires, Argentina, se posiciona como un lugar atractivo para la vida cotidiana, seguida de cerca por Santiago, Chile, y Montevideo, Uruguay, en el segundo y tercer lugar respectivamente.

Sorprendentemente, San Juan, Puerto Rico, se encuentra en la cuarta posición, resaltando su calidad de vida única en la región.

Lima, Perú, cierra la lista en la quinta posición, consolidándose como una ciudad con atractivos para sus residentes.

Estos resultados ofrecen una perspectiva valiosa sobre el panorama de las ciudades latinoamericanas y su capacidad para proporcionar un entorno propicio para la vida.

La evaluación de The Economist destaca no solo factores económicos, sino también aspectos culturales, sociales y ambientales que contribuyen a la calidad de vida de los habitantes en estas urbes.

QUÉ SE DEBE TENER EN CUENTA AL MOMENTO DE COMPRAR UN DEPARTAMENTO

Al adentrarse en la búsqueda y compra de un departamento, diversos aspectos deben ser meticulosamente considerados para asegurar una elección acertada y satisfactoria. En primer lugar, la ubicación del inmueble juega un papel fundamental. Es esencial evaluar la accesibilidad a servicios esenciales como supermercados, centros de salud, transporte público y zonas recreativas. Una ubicación estratégica no solo facilita el día a día, sino que también puede tener un impacto significativo en el valor de la propiedad a largo plazo.

La calidad de la construcción y los acabados del departamento son aspectos cruciales. Inspeccionar la estructura, los materiales utilizados y la mano de obra garantiza que la inversión no solo sea estéticamente agradable, sino también sólida y duradera. Además, considerar la reputación del constructor y revisar la documentación legal relacionada con el proyecto son pasos esenciales para evitar futuros inconvenientes.

El presupuesto personal es un factor determinante en el proceso de compra. Más allá del precio inicial del departamento, se deben tener en cuenta los gastos asociados, como impuestos, mantenimiento, servicios públicos y posibles pagos adicionales. Es crucial establecer un límite financiero realista y no comprometer la estabilidad económica personal en el proceso.

Finalmente, anticipar las necesidades futuras es esencial. Evaluar la posibilidad de crecimiento familiar, la disponibilidad de espacios de almacenamiento y las opciones de expansión en el edificio son consideraciones importantes. Un enfoque a largo plazo en las necesidades cambiantes asegura que la compra del departamento se ajuste a las expectativas y estilos de vida a medida que evolucionan con el tiempo.