Pedal de freno: su importancia para regular la funcionalidad del motor y cómo cuidarlo

El pedal del freno resume toda la seguridad a bordo de un auto que necesitan el conductor y sus acompañantes. Su trascendencia para preservar la vida justifica que sea una pieza a cuidar con mucho detalle. Y eso parte en simplemente conocer su recorrido y presión.

El funcionamiento y cuidado de los pedales de un auto se resume en suavidad, progresión y regulación. Así, el sitio especializado El Motor explica que, como norma general, se deben evitar los abusos sobre estos.

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El pedal del freno tiene la misión de retener el motor. Tiene la capacidad de regular la marcha del auto para minimizar la necesidad de frenar durante bajadas largas, así como antes de encarar una curva. También es el encargado de detener a la unidad en una situación previsible.

Como consejo, si se reduce velocidad a velocidad, la retención del motor apoyará al equipo de frenos. De esta forma, el requerimiento del pedal será menor.

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Mientras que, un error común es pisar el freno con suavidad en el inicio de la detención para incrementar la fuerza sobre el final. Lo ideal es realizar la acción contraria: pisar con fuerza al inicio e ir liberando el pedal según sea necesario.

Con la acción antes descrita se recupera el control del auto en el momento más crítico de la frenada. Así, se evitan situaciones de apuro, como al llegar a una curva o para detenerse ante un paso peatonal.

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Por otro lado, todos los autos modernos cuentan con un sistema de antibloqueo de frenos, el ABS. Este impide perder el control del auto por el deslizamiento de ruedas al quedar detenidas por la excesiva presión de las pinzas sobre los discos.

El ABS es un importante asistente, sobre todo en condiciones de adherencia delicada. Durante una pisada a fondo del pedal de freno en caso de necesidad, se debe mantener firme esa presión, esto aunque empiece la vibración típica del ABS, a la vez que se pisa el embrague para detener el auto por completo.