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La competencia entre las últimas generaciones de smartphones es totalmente pareja. Y la única forma de averiguar cuál de todos es mejor es realizando test de resistencia, videos que los mismos usuarios vienen compartiendo en redes sociales.
Así, como recordamos, las primeras pruebas se basaron en tratar de romper con la mano el celular, algo que, digamos, se consiguió fácilmente. Pero un usuario quiso llevar al extremo el test.
¿Cómo así? Pues con la ayuda de un Tesla Model S. La prueba consistía en que el vehículo, de más de dos toneladas, debía de pasar por encima del Samsung Galaxy S6, con el único fin de que se destruyera por completo.
El usuario que grabó el video 'atropelló' varias veces el smartphone, cuya parte posterior terminó prácticamente destruida.
Sin embargo, la parte delantera logra sobrevivir durante varios 'atropellos', pues seguía funcionando y el táctil no había sufrido mayores daños.
Pero sobre el final del video el detector de huellas deja de funcionar y la pantalla tiene problemas para prender, aunque los botones físicos seguían funcionando.
¿Se podría decir que el S6 pudo sobrevivir al poder de un Model S?
