Finalmente se acabó la desesperación de esperar a encontrar un sitio para aparcar el auto. Y es que en Düsseldorf (Alemania), un robot, llamado Ray, estaciona tu auto sin que la persona haga un máximo esfuerzo.
¿Cómo funciona? El usuario llega al aeropuerto, se acerca a la recepción del estacionamiento, y ahí es donde Ray, tras medir las dimensiones del vehículo, escoge la plaza adecuada. El robot coge el modelo como si fuera un montacargas y lo lleva hasta el lugar.
Para el regreso, hace la operación de manera inversa y deja el auto en la misma puerta para salir. Si la persona decide pasar un rato más en el aeropuerto, puede avisar a través de una aplicación en el Smartphone para que espere a sacar el vehículo.
Por si fuera poco, cuando Ray no tiene oficio, aprovecha el tiempo para reorganizar el garaje y coloca los autos en orden de salida.