“Rescate imposible”: ¿ver o no la película de guerra con Russell Crowe y dos de los hermanos Hemsworth?

“Rescate imposible” (”Land of Bad”) intimida al público usando constantes momentos de tensión en el campo de guerra, gracias a la participación de Liam Hemsworth y Russell Crowe. Para ser una película de un director, William Eubank, que quiso ser “marine” de los Estados Unidos antes de estudiar cine, es una historia muy del Hollywood de acción y deja algunos cabos sueltos, pero a la vez utiliza a sus actores y el tema de las nuevas tecnologías militares para dar su toque propio en poco menos de dos horas.

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Eubank, usual director de películas de terror de acción, vuelca a los personajes militares de “Rescate imposible” al campo de la ironía, donde un operador de drones en una base militar de California, Eddie ‘Reaper’ (Russell Crowe), tiene una vida tan monótona que suele complacer a su esposa con sus antojos veganos y se emociona por la boda de su amiga, la sargento Nia (Chika Ikogwe), cuando no está desesperando por la falta de ética de los otros militares, que prefieren ver un juego de básquet en vez de contestar el teléfono de la base. En un día común de trabajo, el operador se comunica por teléfono con un joven de 27 años, Kinney (Liam Hemsworth), recién agregado a una misión especial en Joló (Filipinas), histórico bastión de ataques terroristas islámicos, y tendrá que ayudarlo a salir vivo del lugar siguiendo su rastro mediante las cámaras panorámicas que lo siguen.

Por un lado, hay momentos metafóricos, casi críticos, sobre el trabajo militar estadounidense y la humanidad del conjunto armado. Por eso, la primera escena es Kinney tratando de decidir el desayuno entre un cereal Froot Loops o un Zucaritas y luego sintiendo consternación en el campo de batalla. Por otro lado, la película no se aleja del cine de guerras sobre rebeldes versus estadounidenses (”Good Kill”, “Zona de combate”), donde prima el drama del héroe y casi siempre alguien necesita ser rescatado; en este caso, Kinney, quien debe correr para llegar a tiempo a la zona de aterrizaje del helicóptero.

Es una película que quiere ser más divertida que heroica, lo cual se nota en el carácter sarcástico de algunos personajes. Un sargento en medio de la tortura no pierde el sentido del humor, “¿Tan pronto nos vamos?”, dice, cuando está a punto de ser rescatado, pero al mismo tiempo hay una carga fuerte de tensión y drama. Eso no desacredita el factor del miedo de Kinney y la amenaza de muerte de rebeldes que aparecen por doquier y son derribados al paso, en armonía de una cámara parecida a un videojuego de matanza con armas.

Incluso, es interesante resaltar la humanidad del personaje principal, Kinney, un joven tierno, infantil y que se da un golpe contra la pared cuando inicia la misión militar. Se puede comparar con el protagonista entusiasta y nervioso de “Sin novedad en el frente”. A nivel de actuación, Hemsworth da la talla en su totalidad y lo hace en las escenas con Crowe, como en los breves momentos iniciales con su hermano Luke Hemsworth, quien hace del experimentado sargento Abel.

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“Rescate imposible” viene con mucha carnicería, hombres ensangrentados y escenas de tortura donde los rebeldes explotan su maldad, y solo hay un quiebre de la personalidad del villano, donde un extremista expresa su punto de vista de la guerra y lo hace en inglés. Sin embargo, también hay momentos injustificados donde un personaje, por ejemplo, sabía de memoria el número de teléfono de una persona que acaba de conocer, o sino sobre-actuaciones de los actores en puntos críticos.

Una de las escenas en particular es muy graciosa. Se trata de un montaje paralelo entre el momento de rescate y la visita de ‘Reaper’ en una tienda de alimentos en la que está tratando de encontrar el antojo vegano de su esposa embarazada. Deben prestar especial atención a esa escena. Y una última cuestión a resaltar en el personaje de Crowe es el retrato de operadores de drones, que poco representados son en la pantalla grande, lo cual es un aprendizaje para el espectador.

Si bien no es una película de evoluciones de personajes complejas, Eubank intenta darle al público lo que quiere, en términos de acción, y que valga la pena la entrada al cine. Los planos son demasiado detallistas (muy cerrados y repetitivos) en el momento de las peleas, ese tipo de escenas son especialidades de otros directores de acción, como Michael Bay, pero, para ser la primera incursión del cineasta en este tipo de películas de guerra, no termina siendo algo aburrido.