Perros y gatos pueden ser amigos, pero no por eso comparten los mismos gustos, sobre todo cuando se trata de sabores. Como sabemos, el sentido del gusto trabaja a través de receptores llamados papilas gustativas, las que se encuentran ubicadas especialmente en la lengua y en menor cantidad en la cavidad bucofaríngea. Nuestras mascotas también tienen preferencias y aquí te contamos cuáles son.
Recibido el alimento se estimula el cerebro, que a su vez desencadena la producción de saliva, secreciones gástricas y pancreáticas para la digestión. La diferencia es que el gato tiene menos papilas gustativas que el perro y, por lo tanto, son más quisquillosos con su alimentación.
MIRA: Royal Enfield, la marca de culto que entró por la puerta grande al Perú y que sigue fascinando a los moteros
Sobre el sentido del gusto en estas mascotas existen muchas teorías. Pero si en algo coinciden los veterinarios es que perros y gatos pueden distinguir sabores básicos como el dulce, salado, amargo y ácido. No en vano prefieren algunos alimentos más que otros.
También se dice que los gatos tienen poca o nula capacidad para sentir el dulce en comparación con los perros, y que por eso prefieren los sabores ácidos. Por otro lado, los perros eligen siempre los sabores dulces y perciben menos los sabores salados.
Buen apetito
¿Por qué los perros son más glotones que los gatos? La razón es que los caninos vivieron en manadas y tuvieron que competir con otros de su especie para asegurar su vida y tenían que comer lo máximo que podían en el menor tiempo posible.
Caso contrario es el de los gatos, que son cazadores solitarios. Cuando obtenían sus presas comían tranquilos, incluso hasta las escondían en lugares altos y regresaban para seguir devorándolas. Los felinos se tomaban su tiempo sin apuro y eso es algo que se mantiene hasta el día de hoy.
VIDEO RECOMENDADO
Contenido Sugerido
Contenido GEC