En un país donde las fibras naturales como la alpaca y la vicuña son el orgullo nacional en el rubro de la moda, otra materia lucha por alcanzar el reconocimiento que merece: el dénim fabricado localmente con puro algodón peruano.
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Considerado un clásico en la historia de la moda, este tejido plano adquiere cada vez más poder en el emporio textil más grande de Latinoamérica, Gamarra, en manos de empresarios con ganas de luchar por un mejor mañana a punta de creatividad y talento.
Pendientes de ese potencial, la empresa textil Nuevo Mundo, con más de 75 años de trayectoria, se ha propuesto girar los reflectores de la industria a este grupo, consolidando una de sus apuestas más ambiciosas este 2024: luego de un minucioso proceso de selección, y entre más de un centenar de negocios, la empresa ha escogido a 20 representantes de marcas dénim de calidad para llevarlas a una de las ferias más importantes de la región, Colombiamoda, en Medellín. El objetivo es claro: conquistar el mercado internacional y demostrar que en el Perú también se fabrica dénim de calidad.
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“Estamos enfocados en dar lo mejor de nosotros en esa vitrina. Los empresarios peruanos, además, nos distinguimos porque sabemos adaptarnos con creatividad, a cualquier nicho o necesidad”, señala el joven diseñador Joel Chirinos, de la marca Haran Now, una de las firmas que llegarán este julio a Colombia. Desde ahora, los motores ya se están calentando para su asistencia a la feria. Los peruanos llegamos a dejar huella.
GIGANTE DORMIDO
Antes de la crisis económica que aquejó al país a raíz de la paralización de los negocios por la pandemia a mediados de 2020, el dénim demostraba un potencial importante en la exportación, por encima de otras piezas textiles: se estima que ese año se exportaron alrededor de 375 mil prendas de jean peruano a distintos mercados del mundo, principalmente al rubro del ‘retail’ en Chile. Sus cualidades, como la comodidad y larga duración, las posicionan como favoritas.
Sin embargo, esa acogida se vino en picada luego de la crisis en salud, seguida por episodios complejos en la política y economía local.
“Luego de tantas complicaciones, este año se espera por fin una mejora en el emporio. Por eso, llegar hasta Colombia con nuestras marcas es tan importante. Ser reconocidos no solo impulsa a las marcas de manera individual, sino a todo el mercado, generando más puestos de trabajo y oportunidades”, defiende Miguel Ángel Ríos, creador de la icónica marca de ropa para niños Miguelito, con una trayectoria de 40 años en el rubro.
Y sí que tiene razón. Si la exportación de dénim peruano logra potenciarse, se necesitará toda una cadena de producción: puestos de diseño, patronistas, tejedores, confeccionistas e incluso mecánicos serán necesarios para atender la demanda.
Los primeros jeans datan de la década de 1870. Nacieron como una prenda orientada al trabajo pesado, pensadas para aguantar alta tensión y diferentes climas. Sin embargo, fue a finales de la década de 1950 cuando arribó a nuestro país, para convertirse en el favorito de las generaciones más jóvenes, influenciados por la corriente del rock y el cine. Hoy en día, el jean desconoce de edades o estilos: hay para todos los gustos.
OPORTUNIDAD DE ORO
El 2024 se ha identificado, además, como un marco ideal para poner en boga el producto de dénim local a gran escala.
La demanda está mejor que nunca: la región necesita exportadores de este tejido plano y el Perú debe aprovechar la oportunidad. La crisis, en parte, se debe a que fábricas y comercializadoras textiles en países como Chile y Colombia han dejado de estar operativas en los últimos años, debido a la crisis económica que aqueja a toda la región. Así, se abren dos caminos para nuestro país: potenciar el talento o dejarse vencer también. La primera, por supuesto, ha sido la elección.
“El algodón peruano es tan bueno que los clientes lo prefieren por su comodidad, duración y frescura. Aquí en Gamarra, muchas de nuestras marcas ya están posicionadas, así que es momento de dar el siguiente paso”, comenta decidida otra de las empresarias elegidas para visitar Medellín con su marca, Neolinda Aguilar, de Brooklyn Jeans, sello que creó en los años 90 y hoy en día produce mensualmente hasta 60 mil prendas. Un éxito.
Más allá del clásico jean que todos poseen en sus armarios, en pleno siglo XXI el dénim ya se adapta también a otras prendas, desde faldas y camisas hasta chalecos e incluso vestidos.
La empresa textil de tejido plano Cía. Industrial Nuevo Mundo S.A. espera hacer historia en la feria de Colombiamoda (la más importante del continente) el próximo julio. Este año lanzaron por primera vez el programa Nuevo Mundo sin Fronteras —donde se inscribieron más de 100 marcas locales—, pero es solo el comienzo de un proyecto a largo plazo. Colombiamoda es una extraordinaria vitrina que enseñará a compradores de todas las latitudes lo que se hace dentro de nuestro país, cuyo impacto puede definir los años venideros. Para más información sobre el proyecto pueden escribir a nmsf@nuevomundosa.com.
De hecho, revistas como “Vogue” e “InStyle” posicionan al ‘full denim’ como una de las tendencias más potentes para lo que queda del año, una razón más para apostar a ganador por este sector de producción en el país.
Para estos 20 negocios locales expertos en dénim que viajarán en unos meses a Colombia, cruzar las fronteras con sus productos ya no es más un sueño pendiente que se empezó a tejer cuando iniciaron sus empresas. Colombiamoda 2024, en Medellín, es el próximo triunfo que ubicará al Perú por todo lo alto. //