Imaginen un bosque del tamaño de todo el distrito de Miraflores. La gestión y protección de esas 916 hectáreas están a cargo de ArbioPerú, una ONG liderada por mujeres: Tatiana Espinosa Quiñones (44) y sus hermanas Rocío y Gianella. Aquella concesión en Madre de Dios, que Tatiana solicitó al Estado y le fue entregada el 2006, estaba siendo otorgada para reforestación, propósito inviable dado que es zona de árboles centenarios, entre ellos el gigante de la selva, el shihuahuaco. “Lo principal era tener presencia permanente en campo, construimos una cabaña y contraté una persona para que vigile. Ahora tengo tres guardaparques en campo, ya está demarcada el área, hay caminos internos para patrullaje, y dos embarcaciones para traslados por río”.
Contenido Sugerido
Contenido GEC