Jorge Chávez Noriega

Al ritmo de la wambarkuna, una danza típica de la provincia ayacuchana de Cantagallo, jóvenes atletas de Venezuela, Panamá, Bolivia y Chile, entre otros países, se divierten bailando y saltando en la Villa Bolivariana de Ayacucho. Muchos de ellos acaban de llegar de sus respectivas competencias y pasar las pruebas de control antidopaje, pero no pueden evitar sacudir un rato el cuerpo, a modo de relajo, entusiasmados por los alegres sonidos de violines, arpas y zampoñas. Giorgio Mautino, exatleta peruano y alcalde de la villa, nos dice que así han sido todos días del evento, al finalizar cada jornada: una fiesta en la que las nacionalidades parecían difuminarse para compartir una misma cultura y tradición, como una gran nación. Como alguna vez lo soñó Bolívar.

MIRA TAMBIÉN: Los Toribianitos: los niños que mantienen vivo el emblemático coro navideño que nació hace más de medio siglo en el Rímac

El ambiente se torna aún más festivo y caluroso cuando llega el equipo peruano de kickboxing, que hace unos instantes obtuvo cinco medallas de oro. Son recibidos entre palmas, abrazos y saludos de felicitaciones por sus compañeros. Los protagonistas de este encuentro son Flor Vilcamichi, Kenny Bellido, Mavet Yupanqui, Edwin Fernández y Ana Cecilia Medina. Sus triunfos permitieron que el Perú llegara a lo más a lo más alto del medallero, un puesto que hasta ese momento compartíamos con Colombia. Están visiblemente cansados, pero no pueden ocultar la felicidad y el orgullo de haber representado al país y ser los mejores de la disciplina que practican. Saben que es un resultado obtenido a base de mucho esfuerzo y sacrificio, pero ahora toca celebrar.

Las pruebas de ciclismo downhill se llevaron a cabo en el cerro Campanayocc, ubicado a 35 kilómetros del centro de huamanga, en ayacucho.
Las pruebas de ciclismo downhill se llevaron a cabo en el cerro Campanayocc, ubicado a 35 kilómetros del centro de huamanga, en ayacucho.

Flor, natural de Ayacucho, nos cuenta que empezó a practicar kickboxing a los 13 años por influencia de sus hermanos mayores. “Representar a mí país en la ciudad donde nací ha sido lo más emocionante que me ha pasado en la vida”, afirma. Con ella concuerda Kenny, un joven proveniente de Anco, distrito ubicado en la zona del Vraem, quien lloró al escuchar su nombre como el vencedor del combate final. “Uno trabaja y se sacrifica para esto. Como a muchos deportistas, nos gustaría recibir más apoyo para seguir creciendo”, comenta el joven luchador.

El peruano Mateo Argomedo ganó el oro en Taekwondo, en la modalidad Poomsae Freestyle individual.
El peruano Mateo Argomedo ganó el oro en Taekwondo, en la modalidad Poomsae Freestyle individual.

Edwin, nacido también en tierras ayacuchanas, comenta que lo más importante para él es ser un ejemplo para los niños. “Promover el deporte dentro de mi comunidad es mi principal misión”, sostiene. Finalmente, Ana Cecilia explica que este es el primer paso para todo lo que podría venir más adelante. “Es la primera vez que el kickboxing está presente en unos Juegos Bolivarianos. Estoy contenta por este logro y por mis compañeros. Creo que este deporte tiene mucho potencial para traerle más alegrías al país. Esta vez hemos competido ocho atletas, pero hay muchos chicos talentosos detrás”, concluye.

GENERACIÓN DORADA

Los Juegos Bolivarianos llegaron a su fin el último 8 de diciembre y, por donde se les miren, el saldo es totalmente positivo: gracias al coraje y pasión de nuestros deportistas durante los doce días de competencias, el Perú ganó 114 medallas y terminó en el primer lugar del medallero. El certamen contó con la presencia de 1.300 deportistas de 10 países: Perú, Bolivia, Colombia, Chile, Ecuador, Panamá, Venezuela (miembros), y Guatemala, República Dominicana y El Salvador (invitados). Este evento, además, ha sido un espacio para descubrir que podemos destacar en disciplinas poco difundidas, como el frontón, gimnasia aeróbica, muay thai, taekwondo, rugby, levantamiento de pesas y muchas más.

“Ha sido una experiencia muy bonita haber compartido con otros deportistas de diferentes países. La gente de Ayacucho ha sido amable, en todo momento hemos sentido su apoyo. El ambiente, tanto en la villa como en las sedes, fue extraordinario. Si pudiera resumir estos días en una sola palabra, diría que fueron una fiesta”, nos confía Thais Fernández, ganadora de dos medallas de oro en gimnasia aeróbica (en la prueba individual y mixta) y abanderada nacional en la ceremonia de clausura. “En general, todo ha estado bien planificado para atender a los deportistas, desde los buses que nos transportaban a las sedes hasta las terapias físicas que debíamos recibir. Si ocurría algún imprevisto, todo se resolvía rápidamente”, añade la destacada gimnasta peruana.

La gimnasta aeróbica thais fernández (en primer plano) fue la abanderada nacional durante la ceremonia de clausura.
La gimnasta aeróbica thais fernández (en primer plano) fue la abanderada nacional durante la ceremonia de clausura.

La edición de los Juegos Bolivarianos de Ayacucho 2024 tuvo un espectacular cierre en el estadio Las Américas de Huamanga que, si bien no estaba terminado (se debe mejorar los accesos y pulir las tribunas), acogió a cerca de 3 mil personas que llegaron a expresar su agradecimiento a nuestros deportistas. “Se elevaron en el altar de la historia. Ustedes son los responsables de hacer que el país sea campeón”, les dijo Renzo Manyari, presidente del Comité Olímpico Peruano. Las banderas de los diez países participantes flamearon en lo más alto del recinto. Los deportistas de todas las delegaciones se volcaron al campo de juego para bailar las canciones de Milena Warthon y Diosdado Gaitán Castro, quienes encendieron a todo el público asistente.

Con música y juegos artificiales, se despidió esta edición especial de los Juegos Bolivarianos, que se realizaron a propósito del bicentenario de la batalla de Ayacucho, un hecho que consolidó la libertad de todo un continente. //

Contenido Sugerido

Contenido GEC