Reparte sus días entre Lima y Piura. Eso sí, con el mar siempre como horizonte. Para Tatiana Calmell del Solar, no hay paisaje que se iguale al de un atardecer en la playa y no hay emoción más grande que comprobar que los sueños se cumplen. Así lo siente ahora mismo, a poco menos de un mes de presenciar su debut en pantalla grande con la cinta “Bienvenidos al paraíso” (Star Distribution LA, 2024). No es su primera vez actuando, pues en 2020 encantó a cientos de espectadores al encarnar una versión contemporánea de la Cenicienta en la serie “Princesas” de América TV. “Grabamos también una segunda temporada, que espero algún día pueda ver la luz”, revela en diálogo con Somos.
MIRA TAMBIÉN: Paracas: los guardianes de la reserva y la biodiversidad de este impresionante destino al sur de Lima
Aunque la actuación la mantiene ocupada en los últimos meses, en esta entrevista Calmell del Solar abraza también sus primeros años en el mundo del modelaje, pasión en la que se abrió camino con apenas 14 años. Con altibajos, recuerda que cada aprendizaje la ayudó a construir su personalidad, y también mira con aliento un futuro donde la plataforma sea más justa y respetuosa para las mujeres.
Debutarás en pantalla grande compartiendo escena con artistas de trayectoria, como Katia Condos, Bruno Odar, Patricia Barreto y Andrés Salas. ¿Cómo te sientes?
Para mí es un honor. Cuando se concretó el proyecto caí en cuenta de que era un paso muy grande para mi carrera, no solamente porque se trataba de un protagónico, sino también porque me tocaba compartir escena con actores de primer nivel. Todos han sido excelentes compañeros.
Además, fuiste dirigida por Ani Alva, la directora peruana más prometedora de los últimos años.
Ani es encantadora. La admiro mucho porque además es una mujer que se desenvuelve exitosamente en una industria donde la mayoría son hombres. Hace sonar su voz no solamente por ella, sino porque se respete el trabajo de todos. Es lo que más me gusta de ella.
Antes de introducirte en la actuación, destacaste por muchos años cómo modelo. ¿Qué te dejó esa experiencia?
Desde niña, supe que quería hacer algo relacionado a las artes. Me gustaba mucho el baile, pero nunca tuve una disciplina fuerte como para hacerlo profesionalmente. Sin embargo, mi mamá se dio cuenta de que también me gustaban mucho las fotos, y así empecé, a los 14 años en comerciales. Luego fui construyendo mi carrera profesional y en quinto de secundaria se me presentó la oportunidad de participar en el Elite Model Look con Mónica Chacón.
Algunos también recuerdan tu paso por el programa “Peru’s Next Top Model”, en 2013
Sí. La verdad tengo varios recuerdos de esa experiencia. Algunos buenos, otros malos y más controversiales. Pero creo que al final rescato que fue un momento de mucho aprendizaje. Recién cumplía 18, era la menor del grupo.
Te eliminaron del ‘reality’ porque tuviste la valentía de alzar tu voz ante un momento incómodo con el modelo brasileño Antonio Borges. Lamentablemente, en ese entonces no se te dio el respaldo necesario.
Fue una eliminación muy mediática. Pero hoy la recuerdo y pienso qué bueno que actué como mi corazón me dijo que me sentía en ese instante. Mirando atrás, estoy orgullosa de haber hablado en su momento y puesto mis límites. Siempre seré fiel a mí y mis principios.
Esto demuestra que el mundo del modelaje no es color de rosa. ¿Crees que ese hecho cambió tu actitud para desenvolverte en el rubro de ahí en adelante? ¿Cómo sientes que ha evolucionado el panorama?
Quizá si el programa fuera transmitido hoy, en pleno 2024, las cosas serían distintas. Me alegra ver que las cosas en la industria están cambiando, porque yo solo fui una joven que expresó cómo se sentía y fui eliminada por eso. En un principio me asusté, y pensé que las puertas se me iban a cerrar. Sin embargo, me aferré a mis principios y finalmente tuve oportunidades para crecer. Mi mensaje sería que jamás se queden calladas si algo sobrepasa sus valores o las hace sentir mal.
En 2022, incursionaste en el mundo de los certámenes de belleza. Te fue muy bien, quedaste como primera finalista en el Miss International en Japón.
Fue una experiencia muy bonita. Esto era un paso más allá de ser modelo, porque ya no solo era Tatiana como ‘percha de un diseñador’, sino que tenía la posibilidad de expresarme más e, incluso, ser vitrina para mensajes de más personas. Gracias a los certámenes, pude conectar más con mis habilidades de comunicación, mi lado más humano y mi disciplina.
¿Qué quisieras conseguir con tu carrera como actriz?
Ahora que estamos por lanzar “Bienvenidos al paraíso”, siento que es mi oportunidad para mostrar un poco más mi faceta de actriz aquí en mi país. Quiero enfocarme en construir mi carrera, formarme más, quizá incursionar en el teatro también. Bruno Odar interpreta a mi papá en la cinta, y él me ha animado mucho a continuar por este camino. Siempre me dice que me espera con los brazos abiertos. Para este 2024, tengo muchos proyectos en mente que me emocionan. //