El día en el que tuvieron que esconder el teléfono de Elon Musk en una caja fuerte para que dejara de tuitear. (Foto: Archivo)
El día en el que tuvieron que esconder el teléfono de Elon Musk en una caja fuerte para que dejara de tuitear. (Foto: Archivo)
Redacción EC

La dependencia de hacia puede llegar a extremos, tal como relata el escritor Walter Isaacson, quien se encuentra trabajando en su biografía. El biógrafo compartió en un Space de Twitter una anécdota en la que un amigo de Elon Musk, Antonio Gracias, quien forma parte de la junta directiva de Tesla, intentó evitar que tuiteara durante la noche. Sin embargo, no tuvo éxito en su intento.

“Durante una etapa en la que Elon publicaba tuits sin ningún tipo de cuidado, los dos estaban de viaje y Antonio tomó el iPhone de Elon y lo guardó en la caja fuerte del hotel, estableciendo un código para que Elon no pudiera levantarse a las 3 de la mañana y comenzar a tuitear nuevamente”, relató Isaacson, quien señala a Gracias como “uno de los amigos más íntimos de Elon”.

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Más tarde, alrededor de las 3 de la mañana, Musk logró que el personal de seguridad del hotel abriera la caja fuerte para poder tuitear nuevamente, afirmó el biógrafo, quien agregó que Musk es “casi adicto al drama de Twitter” y ve ser el dueño de Twitter como una forma de ser “el rey de la jungla”.

El CEO de Tesla ha sido criticado durante años por los mensajes que publica en la red social de la cual ahora es dueño. Incluso en 2018, Ron Baron, un importante inversor de Tesla, le aconsejó que dejara de tuitear cuando estuviera molesto o enfadado.

“Si algo realmente te molesta, ve y da un paseo por la fábrica. Cómprate un helado... Simplemente no uses Twitter”, le recomendó Baron a Musk.

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