BUENOS AIRES. Las altas temperaturas y las lluvias caídas en las últimas semanas en Argentina volvieron a generar, como hace un año, varios ataques de peces carnívoros, conocidos como palometas, en distintos puntos del país, en especial en las zonas cercanas a los ríos.
Dos personas, una de ellas un niño, fueron mordidas este martes, aunque no de gravedad, por ejemplares de esa especie, de la familia de las pirañas, mientras se bañaban en el río Garupá, en la provincia argentina de Misiones (noreste).
En la misma región litoral, donde la población suele bañarse en las áreas fluviales al llegar el verano, el año pasado se registraron más de 70 heridos por el ataque de estos peces carnívoros de agua dulce.
Además de por las palometas, los bañistas tuvieron que tomar precauciones por las rayas, que descansan en zonas costeras.
En otros puntos de Argentina la alerta es por la picadura de los alacranes, animales que también suelen aparecer cuando las temperaturas comienzan a subir en el verano argentino.
Un padre y su hija fueron internados de urgencia la semana pasada, tras recibir picaduras de escorpión en el barrio de Quilmes, en la periferia de Buenos Aires.
Otro caso ser registró ayer en la provincia de Córdoba, donde un niño fue picado de gravedad en el cuello y espalda y se encuentra ingresado en terapia intensiva.
Fuente: EFE