En el 2020, en muchos momentos los científicos han sido protagonistas. (Ilustración: Pixabay)
En el 2020, en muchos momentos los científicos han sido protagonistas. (Ilustración: Pixabay)
Yerson Collave García

A menos de un año del inicio de la pandemia de , ya se cuenta con vacunas aprobadas de emergencia y varias están en ese camino. Este avance, calificado de histórico, muestra la trascendencia que ha tenido la ciencia en estos meses en que el mundo ha enfrentado la incertidumbre.

Así, la ciencia -de manera inesperada- se ha convertido en una de las principales protagonistas de un año que ha significado un reto para la salud pública global. Los epidemiólogos, virólogos, biólogos, entre otros profesionales de la ciencia, han sido los más requeridos en los medios de comunicación, en un intento por explicar lo que estamos afrontando. Y las personas han visto cómo trabajan en tiempo real los científicos para hallar tratamientos seguros y eficaces para las enfermedades.

MIRA: COVID-19: ¿las vacunas podrán combatir la nueva variante del coronavirus?

El Comercio pidió la opinión de tres expertos peruanos en investigación y salud pública respecto al rol que ha cumplido la ciencia este año y cómo aprovechar esta oportunidad en el país. A continuación, sus opiniones:

“Hay una nueva generación de investigadores”


- Juan More Bayona, docente investigador en la Universidad de San Marcos y doctor en inmunología comparada de la Universidad de Alberta

Definitivamente, una de las grandes lecciones que nos da esta pandemia es que la humanidad depende mucho de la ciencia, no podemos vivir sin ciencia, está en todos los aspectos de nuestra vida en mayor o menor medida. En este caso, en la salud, cobra mayor relevancia. Desafortunadamente, en nuestro país la ciencia históricamente ha sido dejada de lado. Sin compararnos con las grandes ligas, a nivel local, en Sudamérica, estamos muy atrasados. Lo bueno es que hay una nueva generación de investigadores, algunos jóvenes y otros no tanto, que se están esforzando para colocar a la ciencia en un buen nivel en el país. También hay una generación de comunicadores que se están sumando a este esfuerzo. Esperemos que esto se mantenga.

- ¿Cómo aprovechar esta oportunidad?

Desafortunadamente, si los científicos no tenemos voz en los organismos de toma de decisiones, nos vamos a seguir quejando y nada va a cambiar. Como la pandemia ha demostrado: si no aprendemos, si no entendemos que la ciencia es fundamental para todos los aspectos de la vida, vamos a seguir condenados a la falta de desarrollo. Debemos aprender de esta situación, sacar lecciones y tomar acción.

“Las universidades tienen que estar a la altura”


- Ángela Uyen, médica y asesora en políticas de salud de Médicos sin Fronteras, con sede en Bélgica

Creo que los investigadores a nivel internacional y a nivel nacional han trabajado de manera incansable. Ha sido un año de una excepcional producción científica. Por ejemplo, yo como asesora de políticas, tengo que consumir ciencia y construir estrategias para influenciar las políticas publicas. Este año ha sido realmente un reto seguir el ritmo de la producción científica, y aunque es verdad que nos hemos centrado en COVID-19, dejando otros temas de lado, hemos tratado de mantener un balance para procurar el acceso a la salud para todos.

La enorme cantidad de producción científica ha significado también un reto en cuanto a ser selectivo y ser mucho mas acucioso sobre la metodología y los conflictos de interés de los artículos que han sido publicados. Por ejemplo, los pre prints [artículos sin revisión por pares] y los resultados de estudios mediante comunicados de prensa se han convertido en practicas habituales, y es importante que los pongamos en perspectiva, y entendamos la finalidad y las limitaciones de cada uno.

- ¿Qué oportunidades deja la pandemia?

Creo que las oportunidades son varias. Por ejemplo, nos queda claro que tenemos una generación de estudiantes de ciencias que van a ser mucho mas críticos con lo que leen, con lo que aprenden, con lo que escuchan, y eso es muy positivo. A mí me hubiera encantado que fuera así cuando yo era estudiante. Ahora las universidades tienen que estar a la altura. Los jóvenes ya no van a aceptar una fachada en lugar de una universidad. Y ahora hay hambre por generar conocimiento y publicar desde pregrado. Me parece importante que muchos jóvenes de pregrado hoy hayan roto los esquemas de mirar a las ‘eminencias o expertos’, y ahora puedan discutir críticamente algunas de sus recomendaciones. Que ahora hasta sea ‘cool’ saber de epidemiología. Eso es realmente inspirador y genera esperanza.

Es clave que las políticas públicas estén basadas en evidencia, sin embargo, recordemos que, en el mundo real, las acciones del estado están guiadas por varios elementos, entre ellos el financiamiento, las capacidades, la agenda política, etc. Estos elementos estarán siempre presentes, sin embargo, si estas acciones no tienen como base la evidencia, va a ser difícil que salgamos adelante como país y como sociedad. Por ello, es clave que los tomadores de decisiones sepan balancear estos elementos.

“Hay investigadores peruanos que sí están generando evidencia para poder tomar decisiones”


- Álvaro Taype-Rondan, médico epidemiólogo e investigador en la Universidad San Ignacio de Loyola

En el mundo, en países donde ya había centro de investigación importantes, se ha sabido potenciarlos, darles presupuestos, para que generen información que pueda guiar la toma de decisiones sobre la pandemia. Y esto se debió a un mayor presupuesto porque se necesitaban respuestas para afrontar esta crisis. Pero hay una línea difusa entre investigadores buscando respuestas y charlatanes. En muchos lugares, no solo aquí, sino en Francia, por ejemplo, algunos investigadores realizaban recomendaciones basadas en gustos o creencias personales. Es un poco difícil para la población aún distinguir entre ambos: el que habla con evidencia y el que no.

En el Perú, la situación ha estado más descabezada. Ante la falta de referentes y con el nombramiento de expertos clínicos sin mucho bagaje en investigación, se terminó haciendo recomendaciones sin evidencia. La mayoría de las decisiones que ha tomado el Gobierno peruano no ha tenido un sustento técnico. En otros países, se mostraban modelamientos matemáticos, por ejemplo, cada vez que se anunciaba una nueva etapa [de reactivación]. O incluso algunos funcionarios en Perú decían que no teníamos tiempo para hacer investigación o cuestionaban que se tomen decisiones basadas en datos. Y, por otro lado, hay investigadores peruanos que sí están generando evidencia para poder tomar decisiones, pero estos esfuerzos están divorciados de la agenda política actual. Todavía falta tender esos puentes.

- ¿Qué hacer para comenzar a tomar decisiones basadas en evidencia?

Aprovechar esta oportunidad va por dos vías: por la educación y la política. En la primera, tenemos a una población que está hablando de temas que no conocían, como ensayos clínicos, epidemiología, etc. Esto puede ser aprovechado por los medios de comunicación y por el gobierno para poder dar mensajes claros al respecto y así educar a la población sobre cómo tomar decisiones en salud. Hay evidencia de que eso ayuda a que las personas puedan identificar la información falsa o sin sustento. Y segundo, en el lado político, las personas están más atentas a lo que dicen los científicos y ya va siendo tiempo de que los científicos comiencen a ingresar a la política o estén en puestos de toma de decisiones. Esta falta de cultura en ciencia es lo que hemos heredado y es algo que debemos trabajar por cambiar, para lo cual es clave un apoyo económico y político.

VIDEO RELACIONADO

Continúan los ensayos clínicos de vacuna contra COVID-19 de Astrazeneca y Oxford
El doctor Alfredo Guerreros, investigador principal en Perú de los ensayos clínicos

TE PUEDE INTERESAR:

Síguenos en Twitter...


Contenido sugerido

Contenido GEC