Monrovia. (EFE). El Gobierno de Liberia anunció medidas "estrictas" para luchar contra la propagación del virus del Ébola en el país, entre las que figuran el cierre de parte de sus fronteras con la excepción de los aeropuertos y otros puntos de entrada importantes que seguirán abiertos bajo control de las autoridades.
Liberia tampoco cerrará otros puntos de entrada importantes como el cruce de Bo Waterside, que conecta el país con Sierra Leona, donde han fallecido cerca de 200 personas a causa del virus.
Así, la Autoridad Aeroportuaria de Liberia aplicará una nueva política de viajes que incluirá la inspección y la realización de pruebas a todos los pasajeros entrantes y salientes del país. El Gobierno liberiano también restringirá las reuniones públicas, tales como las marchas o las manifestaciones.
Además, anunció la creación de un grupo de trabajo, encabezado por la propia presidenta, que trabajará conjuntamente con la Organización Mundial de la Salud (OMS) para frenar el brote del ébola, que ya es considerado una "emergencia nacional".
El último recuento realizado por la OMS el pasado 15 de julio señaló que el ébola ha causado 172 infectados y 105 muertes en Liberia. Ayer, el Ministerio de Sanidad liberiano confirmó la muerte por ébola de un destacado médico en la lucha contra el virus, por lo que ya son 15 los trabajadores sanitarios que han fallecido a causa de la enfermedad en el país.