Luego de 9 meses en el espacio, diversas muestras de esperma de ratón produjeron crías sanas, anunciaron un grupo de científicos japoneses esta semana.
Las muestras de esperma liofilizadas -que han pasado por un proceso de deshidratación- fueron enviadas en el 2013 a la Estación Espacial Internacional (EEI) y regresaron a la Tierra en el 2014. La radiación intensa del espacio ocasionó poco daño al ADN a los espermatozoides, que al llegar nuestro planeta, y al pasar por un proceso de fertilización in vitro, produjeron ratones sanos. Estas crías se convirtieron en adultos con fertilidad normal propia.
Los investigadores -encabezados por Sayaka Wakayama, de la Universidad de Yamanashi (Japón)- dijeron que se trata de un primer paso hacia la reproducción de otros mamíferos, incluso humanos, utilizando esperma preservado en el espacio. Ellos visualizan misiones de varios años de duración o de múltiples generaciones, durante las cuales se podría utilizar tecnología de reproducción asistida para animales domésticos, y también para personas.
Los descubrimientos fueron publicados en la revista especializada "Proceedings of the National Academy of Sciences".
Estudios previos sobre evolucionismo en el espacio han involucrado, entre otros, a peces y anfibios. Los mamíferos son más difíciles de conservar y manejar en un ambiente de microgravedad, por lo que las pruebas han sido limitadas.
Además de visualizar tripulaciones y sociedades a largo plazo, los investigadores ven otras razones para conservar esperma en el espacio, incluyendo la posibilidad de desastres en la Tierra.
La Luna sería ideal para almacenamientos subterráneo de esperma, señalaron los expertos, quienes agregan que el mejor lugar para preservar estas muestras serían los conductos de lava del satélite natural, ya que poseen "temperaturas muy bajas, protección de la radiación espacial, gruesas capas de roca y están aislados de cualquier desastre en la Tierra".
Fuente: AP