Unos restos dentales localizados en Italia muestran que los humanos modernos fueron los responsables de la cultura proto-auriñacense, alrededor de 42.000 años atrás, cuyos artefactos están vinculados a la llegada del “homo sapiens” a Europa Occidental, según un estudio divulgado por la revista Science.
Este hallazgo ayuda a resolver el debate sobre qué grupo fue el origen de esta cultura, que coincidió con el fin de los neandertales en el suroeste y centro-sur de Europa.
Los investigadores no tenían claro si la cultura proto-auriñacense, conocida por sus simples ornamentos, había surgido de los humanos modernos o era una evolución de los neandertales en el sur de Francia.
El equipo liderado por Stefano Benazzi, doctor de antropología de la Universidad de Viena (Austria), analizó incisivos encontrados en dos lugares en Italia y los confrontó con esmalte procedente de registros fósiles de hace 41.000 años.
Posteriormente, comparó uno de los dientes que contenía ADN mitocondrial para encontrar coincidencias con el de los humanos modernos, humanos antiguos, neandertales, homínidos de la Denisova en Asia, otro homínido de España y un chimpancé.
Como resultado, los investigadores confirmaron que los dientes proto-auriñacenses estaban relacionados con la arqueología auriñacense, y dado que los neandertales desaparecieron de Europa Occidental hace cerca de 39.260 millones de años, Benazzi sugirió que la llegada de los primeros habrían provocado el declive de estos últimos.
La Cultura auriñaciense sustituyó 38.000 años atrás, en el suroeste de Europa, a la cultura musteriense en el inicio del Paleolítico Superior.
Fuente: EFE