BRUNO ORTIZ BISSO @Blogdenotas
En noviembre del 2013 tuve la oportunidad de probar el Galaxy Gear, la propuesta de reloj inteligente que lanzó al mercado mundial Samsung. Casi ocho meses después llega a mis manos la segunda incursión de la coreana en el aún joven segmento de la tecnología para vestir: el Gear 2.
Con este nuevo dispositivo me queda claro que Samsung ha sabido aprender de sus errores. Sin embargo, aún considero que hay una deuda pendiente en este tipo de aparatos.
DISEÑO
Aquí es donde se hacen más evidentes los cambios. Han bastado algunos ajustes mínimos para pasar de la voluminosa y pesada versión anterior a una más cómoda y que se siente como un reloj convencional. Sin embargo, hay que tener al lavarse las manos pues se podría mojar demasiado.
La pantalla mantiene el mismo tamaño (1,6”) y con acabado de metal, pero con cambios ligeros: la cámara se ha movido de la correa hacia la caja del reloj y se le ha adicionado un botón que permite regresar al menú anterior, como sucede en los smartphones.
Un dato interesante es que ahora hay la posibilidad de cambiar las correas y que su cargador ya no es tan voluminoso y complicado de colocar.
Otro aspecto para resaltar es con respecto al cargador del reloj. Ahora se trata de un pequeño accesorio que se coloca por detrás del reloj y al cual se conecta el alimentador de electricidad.
DESEMPEÑO
Este modelo no se llama Galaxy debido a que no usa Android sino Tizen, la plataforma móvil de Samsung. Aquí también se nota un cambio: hay más rapidez en la navegación y en la carga de las aplicaciones.
Su procesador es más potente que el anterior (1 GHz de doble núcleo). El dispositivo sigue manteniendo los gestos táctiles para la navegación, necesitando solo tocar la pantalla de arriba a abajo o hacia los lados.
La cámara mantiene el autofocus, ahora es de 2 megapíxeles y sigue captando fotos y videos en alta definición (de hasta 15 segundos). Sigue sincronizándose con aplicaciones de terceros, pero también otras incluidas como el sensor cardíaco, podómetro y asistente de ejercicios.
El Bluetooth es un elemento fundamental en este equipo. Es la tecnología que se usa para la conexión entre el reloj y el teléfono. Si se aleja más de 10 metros, una vibración le alertará que su reloj ha quedado desvinculado.
El Gear 2 mantiene la posibilidad de hacer llamadas, tal como lo hacía el personaje de antaño Dick Tracy. Sin embargo, la calidad del audio no es la mejor. Obviamente esta opción no es idónea si se expone al ruido de la calle.
La batería es un aspecto que podría mejorarse. En uso intensivo (que incluye utilización de aplicaciones, lectura de notificaciones, llamadas y captura de imágenes) puede durar hasta tres días antes de necesitar una recarga.
Cuenta con un sensor infrarrojo que permite -a través de la aplicación Watch On- convertir su reloj en un control remoto universal.
Otra de las principales limitaciones que tiene este equipo -en comparación con otros que ya existen en el mercado- es que solo es compatible con teléfonos inteligentes de Samsung. Es un equipo interesante, pero debe evaluar si es adecuada tamaña inversión.
PRECIO
Se comercializa este equipo en las diferentes Samsung Store de la ciudad a S/. 999.
CONCLUSIÓN
El Gear 2 es una actualización muy interesante que corrige errores mostrados en la primera versión. Sin embargo, aún no corrige un aspecto que es fundamental: su dependencia. Sin un smartphone cerca el equipo pierde mucho.
A favor
- Más cómodo por las mejoras en el diseño.
- Procesador más potente.
- Funcionamiento más fluido.
En contra
- Dependencia de un smartphone.
- No es compatible con otros teléfonos inteligentes.
- La función para hablar por teléfono mantiene la calidad de audio que en la versión anterior.