Chile, El Mercurio/GDA
Un grupo de científicos de la Universidad Estatal de Colorado (EE.UU.) está trabajando en una nueva tecnología para pacientes sordos, buscando ofrecer una alternativa a los implantes cocleares, una técnica que, aunque efectiva, todavía tiene costos muy altos.
Según consigna el sitio de la universidad, el proyecto surge de una "crisis motivacional" de John Williams, profesor del departamento de ingeniería mecánica de la casa de estudios.
Tras décadas trabajando en sistemas de propulsión electrónica para viajes espaciales, el investigador empezó a buscar un nuevo objetivo para sus investigaciones.
Un problema en sus oídos le hizo estudiar el sistema de implantes cocleares y, luego, decidir trabajar en un nuevo método que pueda reemplazar esta tecnología.
Se trata de una placa que se pone sobre la lengua y que transmite impulsos eléctricos al cerebro.
Esos impulsos son creados por un auricular, con base a los sonidos que capta en el ambiente. La idea es que, con el uso constante, el cerebro pueda traducir esas señales eléctricas, permitiendo que la persona "escuche".
El trabajo se basa en dos ideas clave: la lenguaje tiene una serie de conexiones de nervios y el cerebro tiene suficiente elasticidad, incluso cuando la persona es adulta, como para cambiar sus métodos de recepción e interpretación de información.
El equipo lleva un año trabajando en el proyecto, creando distintas versiones de la placa que va sobre la lengua.
Actualmente están evaluando qué tanto varía la sensibilidad de la lengua entre varias personas, para así determinar si, una vez terminado el proyecto, se podrá lanzar una placa universal o se deberá crear una para cada paciente, lo que tendría un impacto importante en el costo.
Si bien la versión actual del dispositivo es bastante grande, con cables saliendo de la boca hacia una unidad externa, el objetivo es crear una versión mucho más pequeña, que quede limitada a una placa dentro de la boca.
Para desarrollar la tecnología y eventualmente llegar con ella al mercado, Williams y parte de su equipo crearon un emprendimiento llamado "Sapien".