El saber cómo dominar las inesperadas situaciones que se presentan en alta mar es una de las principales cualidades que debe tener un socorrista del cuerpo de Guardacostas de EE.UU.
Por ello, una de las pruebas incluye la simulación de una de las situaciones más extremas que se tengan que enfrentar: la lancha en la que se encuentra el postulante se volteó debido a la presencia de un huracán y deberá escapar rápidamente para ponerse a salvo.
De acuerdo con la "Mecánica Popular", esta prueba controlada se realiza en las instalaciones de Elizabeth City, en Carolina del Norte, en un complejo preparado especialmente para este y otros entrenamientos. En las piscinas especialmente adecuadas se pueden generar olas, relámpagos y hasta reproducir el ruido de los helicópteros de salvataje.