Una YouTuber sufrió un accidente doméstico y perdió uno de sus dedos. Debido a que le traía problemas al hacer cosas simples durante su día a día, decidió solucionar este incoveniente creando un dedo en su impresora 3D. El proceso lo mostró en un video cuenta con más de 2,9 millones de visualizaciones hasta el momento del cierre de esta nota.
Martina, junto a su novio Hansi, tienen el canal Nerdforge en YouTube, el cual cuenta con 2,2 millones de suscriptores. Ambos realizan videos sobre impresión 3D, pintura, cosplay, entre otros, siempre relacionados a la cultura popular. En este caso, la noruega mostró cómo aprovechó la tecnología actual para fabricar un dedo que había perdido.
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En 2017, Martina y su novio estaban realizando renovaciones en su casa. Mientras ella armaba un estante, tuvo un accidente con una sierra. Pese a que los médicos trataron de salvar su meñique con un par de cirugías, finalmente no lograron que conserve su dedo. Esto le dejo varias cicatrices a lo largo del brazo y la mano, así como un anular que no puede mover correctamente. Además, tuvo que pasar por una terapia que duró varios meses.
En estos años, la YouTuber no podía hacer cosas simples con su mano izquierda, como sostener su celular, recoger polvo, sostener varios objetos pequeños o incluso escribir fácilmente en un teclado. Por ello, decidió probar con una guía de un dedo prostético realizado con impresión 3D.
Este dedo artificial permite retraerse y extenderse gracias a unas ligas. Es decir, estas simulan el trabajo de los tendones para que el aparato prostético funcione como lo haría un dedo real. A partir de esta base, Martina fue probando de qué manera le funcionaba mejor.
Tras imprimir la primera versión, notó que las “falanges” del dedo prostético eran más grandes que el resto. Por ello, decidió reducir el tamaño y, además, añadió un guante que le permitiera sostener el dedo más fácilmente. La segunda versión ya parecía más a un dedo real, pero el problema que encontró fue que el elástico que sostenía el dispositivo en su mano podría terminar ajustando demasiado su muñeca.
Para la tercera versión, Martina creó una pieza que iría justo detrás de la palma de la mano, pegada sobre el guante. Así, ya no necesitaría el elástico sobre su muñeca y esta nueva pieza funcionaría como la base de los “tendones”. Ahora, la YouTuber tenía un guante que simplemente podía ponerse o quitarse cuando quisiera.
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Con este resultado, Martina simplemente personalizó su creación. Le dio un color plateado a las partes del guante para generar contraste con el negro y agregó una linterna localizada en la punta del dedo prostético. Esta, al igual que los tendones, tiene una base en la parte trasera de la mano y se puede encender y apagar a gusto del usuario. Con ello, concluyó su invento.
La YouTuber también mostró si este dedo prostético le ayudó a solucionar los problemas que estaba teniendo. Si bien ahora podía sostener su celular, o recoger muchos objetos pequeños sin que se le caiga, el incoveniente seguía presente en algunos casos. Por ejemplo, Martina ahora puede sostener correctamente un vaso, pero no le es tan simple escribir en un teclado. Esto se debe a que este accesorio no cuenta con un músculo, como sí lo hace un dedo humano. Por ello, es difícil realizar acciones complejas que requieren un tacto más marcado. Pese a ello, la noruega indicó que se sentía más segura a la hora de hacer muchas actividades.
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