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Los exoesqueletos son estructuras equipadas por diversos sistemas robóticos y mecánicos desarrolladas para dotar a los humanos de una fuerza adicional para tareas cotidianas en un ámbito industrial. A su vez, también existen diversos prototipos para asistencia médica para pacientes con problemas de movilidad.
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El exoesqueleto Prosthesis está disponible en un programa pago para que cualquier persona pueda probar su capacidad de fuerza a la hora de destruir autos o cualquier otro objeto. (Difusión)
Sin embargo, la firma Furrion Exo-Bionics desarrolló el gigantesco exoesqueleto Prosthesis, una pieza de 4.000 kilos de peso que busca ser un traje mecánico todoterreno para las competencias de robots mecha, como se conocen en la jerga de la animación japonesa a estos inmensos robots comandados por pilotos humanos.
Presentado en 2017, la evolución de Prosthesis en estos años le permitió coronarse como el exoesqueleto de cuatro patas más grande del mundo según la certificación de Guinness World Record. Después de alcanzar este logro de ingeniería, sus creadores planean crear un torneo de peleas de trajes robots piloteados por humanos.
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Es el mayor exoesqueleto del mundo y sus creadores planean utilizar este traje para un torneo de lucha de robots mecha. (Difusión)
“Los exoesqueletos solo funcionan si están bajo el mando de un piloto humano, que se encarga de realizar todos los movimientos. Los movimientos de piernas y brazos pasan a formar parte de una extensión del traje para moverse. Esto convierte a Prosthesis en un elemento clave para este torneo de robots mecha”, dijeron desde la firma Furrion Exo-Bionics.
Para participar de este torneo de trajes robóticos los organizadores presentaron el Alpha Mech Pilot, un programa que cuenta con diversos niveles de inscripción, que van desde los 190 hasta los 1900 y hasta los 10.000 dólares para probar el traje robótico o participar de un programa de entrenamiento de tres días.
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Como antecedente, en 2017 las firmas fabricantes de robots gigantes MegaBots y Suidobashi protagonizaron una pelea de exoesqueletos en una fábrica abandonada de Japón, donde el representante estadounidense Eagle Prime doblegó a Kuratas, que quedó inutilizado, echando humo.
Con información de La Nación de Argentina (GDA).
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