La pandemia de COVID-19 dejó ver los problemas en la atención de pacientes en el Perú, sobre todo en los casos de alta complejidad por el riesgo de contagio. Pero esto podría encontrar una respuesta en la tecnología con el uso de robots como Qhali, una robot enfermera.
Se trata de un proyecto que ya cuenta con un prototipo y que está en etapa de pruebas. Este robot nació en las aulas de la Pontificia Universidad Católica del Perú, con un equipo de investigadores bajo la dirección del profesor Gustavo Pérez-Zúñiga.
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“A partir de iniciativas anteriores, y ante la problemática del Covid-19, vimos cómo a través de nuestra ingeniería podíamos desarrollar algún tipo de solución”, indicó a El Comercio, pues detectaron cómo los pacientes en salas de cuidados intensivos tenían altos niveles de estrés y ansiedad, no contaban con familiares y también tenían una atención limitada pues los terapeutas podían contagiarse.
Por eso, este robot de acompañamiento puede ser de gran ayuda. Debido a sus características físicas, se trata de un robot humanoide expresivo que cuenta con pantallas que le permiten transmitir diferentes efectos emocionales.
El proyecto ya tiene dos años y actualmente está a la espera de la validación de los centros de salud para entrar en una etapa de pruebas. “Comprenderán que se requiere una serie de protocolos que tienen que ser aprobados por las áreas correspondientes. Estamos cubriendo todo lo necesario, además de las metodologías de uso para que estas validaciones sean confiables y demuestren la efectividad”, comentó.
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Otro de los detalles en los que se trabaja es que el equipo sea de un costo óptimo para que pueda estar al alcance. Y es que el robot Qhali trabaja con inteligencia artificial, para lo que necesita gran cantidad de sensores.
Una de las señales de que este robot es peruano está en el nombre. "Se llama Qhali, que tiene que ver con salud en quechua. Queremos transmitir esa forma de conectar la ingeniería peruana, demostrar que tenemos la capacidad de desarrollar ese tipo de soluciones como los laboratorios más importantes", comentó Pérez-Zúñiga.
Robot de alta tecnología
La tecnología es una de las características de Qhali. Reúne diferentes mecanismos que desarrollan la parte mecánica y eléctrica, pero a nivel de software el equipo de Pérez-Zúñiga ha trabajado su propia plataforma que incluye el uso de inteligencia artificial.
“Está dotado de diferentes herramientas de inteligencia artificial para medir, por ejemplo, signos vitales, para medir emociones a través de reconocimiento de imágenes, y lo estamos dotando de algunas otras herramientas en las manos intercambiables para que pueda hacer mediciones de oxígeno, ritmo cardiaco, temperatura, etcétera”, comentó.
La presentación de este robot se realizó durante la Feria Tecnológica LinkING PUCP 2023. Allí conocimos una demostración de los movimientos que puede realizar el robot, sus actividades y algunas otras características.
Por ejemplo, y una de las cosas que llama la atención es que Qhali cuenta con los sensores LiDAR (Laser Imaging Detection and Ranging) que le permite un movimiento autónomo, tal como funcionan los conocidos robotaxis que se prueban en países como Estados Unidos y China. Además, usa sensores de ultrasonido para identificar objetos cercanos.
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“No olvidemos que en las salas de los centros de salud los espacios son muy limitados, las personas se están moviendo de un lugar a otro y para que el robot se pueda trasladar de forma segura tiene que tener que estos equipos”, explicó el especialista.
No solo eso. También cuenta con una cámara de profundidad en la parte inferior y una cámara superior para reconocer personas. Todos estos elementos le permiten al robot obtener datos para ser procesados por la inteligencia artificial.
Ya en la parte posterior se pueden encontrar diferentes microcontroladores distribuidos para las tareas del robot, un computador principal de alta velocidad con tarjetas específicas para los movimientos.
Es así como la tecnología abre una oportunidad para mejorar la atención en los centros de salud con la robótica. Solo es cuestión de tiempo para verlos.