Fue en 2009 cuando Hidetaka Miyazaki junto a From Software deslumbraron al mundo con Demon's Souls. Desde ese entonces, han pasado diez años en los que el estudio japonés ha conseguido hacer lo que pocos desarrollares pueden: entregar con cierta frecuencia grandes videojuegos. La compañía con sede en Tokio, lanzó el pasado 22 de marzo uno de los juegos más importantes y retadores de la actual generación (y del año, claro): Sekiro: Shadows Die Twice.
- [Game Awards 2019 | Lista completa de ganadores de los ‘Óscar de los videojuegos’]
El nuevo título de From Software, distribuido en todo el mundo por Activision, pertenece al género de acción-aventura en tercera persona. Esta clase de videojuego es uno de los más populares en la industria, pues diversos juegos se agrupan en esta categoría, tal es el caso de los Assassin’s Creed o God of War. No obstante, los rasgos principales de cada título los diferencian.
La nueva entrega de la desarrolladora japonesa se encuentra disponible en PlayStation 4, Xbox One y PC desde el 22 de marzo.
Sekiro: Shadows Die Twice no es para cualquier público. Este juego puede costarle más a los que juegan de manera casual. La nueva entrega mantiene el distintivo agregado, el clásico sello, de From Software: la elevada dificultad, ligeramente mayor a la del promedio de videojuegos de la actual generación. Es cierto que el reto es superior; sin embargo, la satisfacción que te brinda la obra de Miyasaki luego de vencer a un jefe o derrotar a enemigos ocultos por doquier es altísima.
A continuación, te presentamos los puntos principales de Sekiro: Shadows Die Twice que acompañan nuestro veredicto final.
El juego se ubica a finales de la era Sengoku (siglo XVI), en Japón. Una época marcada por la gran cantidad de guerras entre las principales fuerzas del país asiático. En ese sentido, tomaremos el papel de El Lobo, el personaje principal de la historia. Él es un shinobi (o ninja) que tiene la misión de proteger, sobre todas las cosas, a su amo.
En los tráilers presentados por Activision y From Software, se observa que el amo de El Lobo es secuestrado por el clan Ashina tras una feroz batalla. El Lord Genichiro, líder del clan, vence al personaje principal. De esta forma, la misión principal del videojuego es ir a salvar al amo. A lo largo del camino, El Lobo tendrá que enfrentarse con diversos enemigos para completar su objetivo.
Además, en la batalla entre El Lobo y Genichiro, el segundo le corta el brazo a nuestro personaje principal. Lo que provoca la derrota y la casi muerte del shinobi. Este, cuando despierta después de ser creído muerto, descubre que un Busshi (monje escultor) lo rescató y le colocó un brazo ortopédico de reemplazo.
En primer plano, parece una historia sencilla y descriptiva. En teoría, lo es. Es fácil de entender en términos generales. Sin embargo, como punto característico de obras de From Software, el videojuego se puede pasar de diversas formas. Existen variados caminos por los que podemos ir, no hay una sola forma de terminar el juego. Asimismo, las historias secundarias que se encuentran en el juego enriquecen la experiencia. Gracias a los comentarios que nos dan, conocemos parte del universo de Sekiro: Shadows Die Twice.
Te mostramos cómo un personaje no jugable (NPC) interactúa con El Lobo:
Los diferentes finales a los que podemos acceder no solo dependerán de que peleemos con un jefe distinto en determinado momento. También importará cómo es que llegamos a cada punto; es decir, los secretos que descubramos, las personas con las que hablemos, las veces que tengamos que morir (sí, si importa, ya que esto modifica la historia), entre otros.
Te dejamos el tráiler de la historia:
El Japón feudal de finales del siglo XVI se ve precioso. El trabajo de From Software está muy bien logrado. No obstante, el título se aprecia mejor en PlayStation 4 Pro, Xbox One S o en una computadora potente. En PS4 estándar, el videojuego en algunas ocasiones sufre caídas de fotogramas. Sin embargo, son mínimas.
Te dejamos unas fotos del diseño de Sekiro:
A diferencia de los anteriores juegos de From Software (saga Dark Souls, Bloodborne o Demon's Souls), la jugabilidad en Sekiro: Shadows Die Twice es más veloz y ágil. No nos pasará que vamos por un risco y por un mal movimiento del joystick caigamos y perdamos toda la partida. El juego ya no es tan cruel, al menos en ese sentido.
Asimismo, como se mencionó, tras pasar un nivel de introducción al inicio del juego (donde aprendemos las teclas principales), El Lobo perderá el brazo a manos de Lord Genichiro. Ello provocará que un bushii nos coloque un brazo ortopédico. Esta nueva herramienta nos ayudará en varios momentos del juego. Por ejemplo, a movilizarnos o luchar.
A diferencia de la franquicia Dark Souls o Bloodborne, en Sekiro: Shadows Die Twice podremos saltar, incluso utilizar saltos dobles o pegar patadas. De esta forma los combates se vuelven más ágiles y frenéticos.
Te mostramos cómo se ven los saltos:
Otro extra del juego protagonizado por El Lobo es que te da la opción de espiar a los enemigos mientras conversan, gracias a ello conoceremos detalles sobre la historia.
En Sekiro: Shadows Die Twice el sistema de lucha de es progresivo. Conforme vayamos explorando nuevas zonas, peleando con subjefes (que al morir nos darán puntos especiales para subir de nivel), derrotando enemigos más básicos, tendremos más experiencia para comprar nuevas habilidades en el juego. A su vez, conocer el mapa nos traerá recompensas. Ya que, en algunas ocasiones, podremos encontrar hasta nuevas armas para nuestro brazo ortopédico. Desde lanzadores de shuriken, hachas hasta escudos.
En Sekiro: Shadows Die Twice tendremos que pasar por zonas donde es mucho mejor pasar desapercibido:
Las posibilidades para asesinar guardias o lobos incrementará con nuevas armas especiales. From Software, para evitar que los jugadores abusen de estas herramientas, ha empleado un sistema de 'emblemas espirituales', para utilizar las armas de prótesis tendremos que pagar con emblemas espirituales que se consiguen matando enemigos. De esta forma, luchar e ir por guardias más débiles nos ayudará bastante.
Además, otro punto importante en la jugabilidad es la barra de postura, un símil del clásico mostrador de energía. Con él, dependiendo si los enemigos la tienen o no completa, podremos utilizar poderosos ataques. Nosotros también contaremos con esta barra, por lo que importa mucho evitar sufrir ataques; en el caso de que nuestra postura sea muy alta, los enemigos nos fulminarán y si la tenemos baja, tendremos que procurar mantenerla así.
El árbol de habilidades de Sekiro: Shadows Die Twice no es el más completo en toda la historia de los videojuegos. Sin embargo, sí que posee diversas opciones de habilidades que nos ayudarán en toda la partida, a menos que seas un experto, revisar este apartado es muy importante. Ya que pasar la historia del título solo con ataques básicos y cuidando la postura no es suficiente.
El árbol nos brinda la opción de mejorar nuestro sigilo, agregar nuevos combos a los ataques básicos o aprender diferentes formas de rechazar golpes. Sin duda, es importante conocer qué podemos comprar gracias a los puntos de habilidad que nos brindan los subjefes y jefes.
Aquí el árbol de habilidades:
Saber cómo luchar es importante en Sekiro. Sin embargo, no siempre ir de manera directa es la solución, en otras ocasiones será mejor eliminar a la mayoría de enemigos de forma sigilosa. Este elemento es de gran ayuda, pues contra ciertos subjefes podremos bajarle una de sus dos barras de vida de manera exitosa. Lo cual nos facilita las batallas.
Aquí dos claros ejemplos de ataques bien pensados:
Justamente gracias a su sistema de lucha, la barra de postura o los enfrentamientos frenéticos es que la joya de Miyazaki posee una jugabilidad muy rica.
Pocas veces hemos visto que un juego penalice tanto a sus jugadores por morir. En el videojuego del estudio japonés, si no eres bueno y te la pasas muriendo, afectará en la historia principal. En el mundo de Sekiro, El Lobo tiene una enfermedad conocida como "Dracogripe", en un inicio nos costará entenderla; sin embargo, mientras vayamos pasando las misiones nos daremos cuenta que si perdemos demasiado, algunos jugadores no jugables (NPC) estarán enfermos y sus conversaciones cambiarán.
La Dracogripe es una tos de sangre que se ve en los jugadores no jugables. Si perdemos demasiado, ellos contraerán la enfermedad y la historia del juego podría cambiar. No obstante, existe una forma de curar la Dracogripe, encontrar la cura dependerá de cuánto exploremos el mapa. Ya que necesitaremos un item especial para curar a las personas.
Otro punto importante sobre la muerte en Sekiro es la resurrección. En el videojuego podremos morir en dos oportunidades, por algo el título oficial del juego es Sekiro: Shadows Die Twice (las sombras mueren dos veces). Pareciera que esto volviera más fácil al título, pero no siempre es así. Debemos usar con inteligencia nuestra resurrección, porque en ocasiones nos convendrá morir y volver con mejores items o habilidades.
La resurrección es un pequeño círculo rosado que nos aparece sobre la barra de vida de El Lobo. En ocasiones podemos llenar dos círculos o más. Para tener los círculos llenos, debemos eliminar a los enemigos con rupturas de postura. Solo de esta forma llenaremos nuestro marcador de resurrección.
Al inicio del juego, para los jugadores nuevos que todavía no han jugado un título From Software, puede costarles un poco. El juego es difícil, pero justo. Requiere paciencia, constancia, concentración y habilidad. Los jefes principales de la historia poseen un reto considerable; los subjefes y enemigos básicos, también. Si nos agarran en un momento en que tenemos la barra de postura alta nos machacarán de un golpe.
Sekiro: Shadows Die Twice es una joya. Uno de los mejores juegos del año, tanto por su jugabilidad reinventada (respecto a la saga Souls), por sus gráficos que en PC, PS4 y Xbox One se dejan ver muy bien y por su sistema de lucha progresivo y desafiante. El videojuego de From nos hace detenernos, pensar la táctica y evadir los problemas fuertes para luego solucionarlos con inteligencia.
Además, la satisfacción de comprender un mundo como el de Sekiro a través de los personajes secundarios no jugables o escuchando conversaciones de soldados es magnífica.
Sekiro: Shadows Die Twice es uno de los mejores videojuegos del año y probablemente uno de los más logrados de la generación. Su sistema de lucha dominado por la postura o las herramientas ortopédicas sirven para asegurarnos horas de retos. Los jefes y enemigos más comunes mantienen un elevado nivel que a cualquier jugador le causará bastantes problemas.
Asimismo, la agilidad con la que nos movemos también está presente en los enfrentamientos contra jefes, ya que nuestro doble salto nos ayudará a esquivar ataques. El frenesí de la batalla estará muy elevado.
Si eres un jugador casual que use su tiempo libre en partidas de battle royal, quizás no disfrutes en un inicio a Sekiro. La historia principal te podrá costar como mínimo cerca de 35 horas, mucho menos si eres un jugador experto o ignoras las misiones secundarias que pueden darse.
▶︎ Lo bueno
- Jugabilidad muy bien lograda y precisa. Transportarnos por los tejados de un gigante castillo resulta muy satisfactorio. - El sistema de lucha basado en la postura nos da la opción de hacer grandes daños. Ojo, hay que dominarlo si es que no queremos sufrir estos ataques. - El diseño de los mapas y zonas está muy bien logrado. - Curva de aprendizaje que no deja de subir, cada jefe enemigo tiene un estilo propio que es bueno memorizar. - El mundo de Sekiro nos ofrece diversos enemigos y secretos ocultos.
▶︎ Lo malo
- En comparación a las entregas anteriores de From Software, no tenemos la capacidad de mejorar a nuestro personaje con determinadas armas como arcos o magia ni de portar armaduras. - En PlayStation 4 estándar en algunos momentos hay problemas de caída de fotogramas.
DATO: Sekiro: Shadows Die Twice fue lanzado el pasado 22 de marzo a nivel mundial para PlayStation 4, Xbox One y PC. En nuestro país, en tiendas especializadas, el videojuego tiene un coste de S/. 239,00.
Síguenos en Twitter: