Quedarse a vivir en México con sus hijos es parte de los planes de la primera dama, Angélica Rivera, ahora que terminó el sexenio de su esposo, el ex presidente Enrique Peña Nieto. Esto y su interés por regresar a hacer televisión fue lo que contó hace unos días la actriz a Pati Chapoy y su equipo de Ventaneando en su reunión con ella en Los Pinos.
"Me comentó que ella se queda en México junto con todos los hijos y que van a tratar de descansar una larga temporada porque fue muy agobiante el trabajo de ambos; de cómo ella resolvió estar en el ojo del huracán permanentemente y cómo logró madurar toda esa parte de ella, que fue una experiencia fuera de serie. De eso platicamos", contó la periodista mexicana.
La titular de Ventaneando dijo que le sorprendió enterarse de otros detalles de la historia de amor de la actriz con el Presidente de México, que formarán parte del libro en el que ella contará detalles de su vivencia en Los Pinos y en el Estado de México como esposa del gobernador.
"Platicó de cómo llegó ella a conocer a las primeras damas de muchísimas partes del mundo. No sabe cuándo vaya a salir (el libro), si en uno o dos años"
Respecto a si la aún primera dama volvería a las telenovelas, Chapoy comentó:
"Me dijo: ‘Ya tengo a propuestas de algunas productoras para hacer alguna serie de televisión’. Mencionó que le mandaron algunos libretos y que va a esperar el que a ella le gustaría realizar".
Sobre si notaba alguna diferencia entre la Angélica Rivera que conoció cuando hacía telenovelas y la que ahora ha dejado de ser la primera dama de México, la periodista consideró que sigue siendo "una chica encantadora".
"Sigue siendo la misma que conocí hace muchísimos años, sigue manteniendo esa calidez, ese trato de toda la vida, yo no le vi ningún cambio que sea muy notorio. Sigue siendo una mujer buena".
El pasado 1 de diciembre, Enrique Peña Nieto entregó la Banda Presidencial a Andrés Manuel López Obrador para que cumpla su periodo como primer mandatario del país (2018-2024).
Peña Nieto se despidió de un sexenio marcado por una serie de escándalos de corrupción y violencia. A esto se suma las críticas a su esposa, la ex actriz Angélica Rivera, una primera dama calificada de "despilfarradora" y desconectada de la realidad de los mexicanos.
López Obrador, por su parte, conocido como AMLO, tendrá que procurar ese delicado acto de equilibrismo en un país sumido en una sangrienta guerra contra el narcotráfico y el crimen organizado, con índices de corrupción sin precedentes y donde cuatro de cada 10 de sus ciudadanos vive en la pobreza.