Como millones en todo el mundo, Derek Padula creció viendo “Dragon Ball” las tardes después del colegio. Veinte años después, la historia de Gokú, el saiya criado en la Tierra, se mantiene en la vida de este habitante de Michigan (EE.UU.), al punto de llevarlo no solo a graduarse en estudios asiáticos y practicar artes marciales y meditación; sino a investigar su área de interés.
Esa área de interés es, obviamente, “Dragon Ball”, sea desde el enfoque etimológico de los términos empleados; los referentes culturales que formaron al autor, Akira Toriyama; la influencia de esta historia en fans de todo el mundo; e incluso la espiritualidad del mismo Gokú, un hombre de acción con aspectos que no son obvios a simple vista. Él ha escrito ocho libros acerca de “Dragon Ball” y tiene ideas para otros, como un volumen sobre la ciencia mostrada en esta historia.
►"Dragon Ball": logran récord mundial de ‘kamehameha’ en Comic Con de San Diego
►"Dragon Ball Super": ¿Cuánto dinero genera la exitosa serie?
Padula sabe lo “obsesionados” (sus palabras) que están los fans de “Dragon Ball” en América Latina, donde se desarrollaron proyecciones públicas de los episodios finales de “Super”, que en algunos casos fueron auspiciadas por gobiernos locales (algo que no necesariamente fue visto con buenos ojos por la productora Toei Animation).
Él dejó su trabajo en una compañía de almacenamiento de datos para escribir sobre “Dragon Ball” a tiempo completo, de modo que para complementar sus ingresos tuvo que trabajar como diseñador web freelance. Vivió un tiempo en Nueva York, donde llegó a tener 12 rommates en simultáneo e incluso durmió en una cocina. En 2014 volvió a casa de sus padres en Michigan “como muchos millennials han hecho”, dijo. Él también llevó su fanatismo al siguiente nivel, escribiendo episodios de una webserie basada en la historia de Trunks del futuro.
Nota: la siguiente entrevista ha sido editada y condensada para ofrecer claridad.
-Tú creciste con la serie de Akira Toriyama. Háblame de este camino tuyo de ser solo un fan hasta convertirte en un académico de “Dragon Ball”.
Me enamoré de la serie a los 14 años cuando se transmitió por primera vez en “Toonami” de Cartoon Network. “Dragon Ball Z” era única, absolutamente asombrosa; una épica de artes marciales llena de increíble acción y humor, con personajes que podías seguir en su viaje. Era diferente a los dibujos occidentales normales, donde todo se resolvía al final del episodio sin repercusiones. “Dragon Ball Z” era, de verdad, emocional, con eventos serios que ocurrían, con muertos y heridos; el personaje principal (Gokú) murió en los primeros episodios (risas), luego va al otro mundo, hay extraterrestres... es difícil poner en palabras cuánto “Dragon Ball” cambió mi vida y la vida de otros. Fue una serie que me hizo sentir emocionado por aprender más de la cultura oriental, empezando por la historia de vida de Akira Toriyama. Eso me llevó a las artes marciales, empecé a practicar kung fu Shaolin en un lugar cerca de donde vivo; eso me llevó al budismo y al taoísmo con el tai chi. Eventualmente estudié en Beijing (China), donde aprendí de los monjes Shaolin directamente y de los maestros del tai chi. Aprendí chino y meditación falun dafa, lo cual me llevó a la espiritualidad oriental. Luego empecé a escribir mis ideas en una web, The Dao of Dragon Ball.
-¿"Dao" significa “camino”, cierto?
Sí, el camino que la gente sigue para acercarse a la verdad. El “dao” se enfoca en la verdad, simplicidad, en ser recto y genuino. El budismo se enfoca en la compasión, eliminar el sufrimiento y las cosas a las que estamos atados en la vida. “Dragon Ball” tiene ambos elementos, con gran énfasis en resistencia y paciencia; la idea de avanzar en la adversidad para alcanzar niveles superiores y propósito. Toda esa cultura está imbuida en “Dragon Ball” y la gente la experimenta alrededor del mundo y son inspirados por ella. El creador no tenía interés en inspirar, solo quería entretener; pero toda esa cultura está ahí de todas maneras e inspira a gente. Es parte del por qué es tan popular.
“Dragon Ball” representa el sueño de Toriyama: son sus cosas favoritas combinadas, aquello con lo que creció".
Derek Padula
-¿Cómo describirías la mentalidad de Toriyama cuando creaba la historia?
Alegre, esa es la mejor palabra para describirlo. Akira Toriyama escribe para niños japoneses de 12 años y su objetivo es entretenerlos, eso es todo lo que quiere hacer. Pero usa como marco de referencia la leyenda china “Peregrinación al oeste”, del Rey Mono y sus viajes a la India para recuperar los antiguos sutras de Buda. Al hacer esto tiene como base el contenido espiritual, pero para hacerlo entretenido lo moderniza, combina oriente y occidente con elementos de ciencia ficción de “Terminator”, “Alien” y “Star Wars”; así como la cultura popular japonesa del tokusatsu (“Godzilla”, “Ultraman”) y “Super Sentai” (“Power Rangers”); la cultura tradicional como los samuráis, el shinto (la religión oriunda de Japón). Él combina todos estos elementos diferentes para hacerlo divertido e interesante para sus jóvenes lectores y, de verdad, “Dragon Ball” representa el sueño de Toriyama: son sus cosas favoritas combinadas, aquello con lo que creció. Le habla a los niños japoneses que crecieron con esas cosas, pero también le habla a los occidentales.
-¿Es ese el por qué “Dragon Ball” todavía es popular 30 años después de su publicación original?
Sí, es por esta fusión de cultura oriental y occidental. Hay muchos mangas hermosos de ver, bien escritos con mucha acción y emoción… pero no tienen tanta popularidad ni sobreviven tanto como “Dragon Ball”. Tienes que ver más profundamente y preguntar por qué es tan popular aún, por qué le gusta a la gente a donde vayas. En muchos casos “Dragon Ball” estableció la industria del anime en un país, fue el que abrió las puertas y creó las compañías que empezaron a doblar cientos de otros animes.
-En el Perú de los años 90 había una iglesia que gastó tiempo y dinero en decir que “Dragon Ball” era una creación satánica. ¿Dime, durante tu investigación te has topado personas que odian “Dragon Ball”?
Sí, hay personas que toman una posición religiosa contra “Dragon Ball” y lo ven como algo ofensivo a sus creencias, hay algunas en Estados Unidos también. Es una minoría, pero ni siquiera es una minoría vocal porque no escuchas de ellos muy seguido, especialmente hoy que el anime es popular. Pero sí, en los 90, cuando apareció, había personas que decían que era satánico, que difundía mensajes malvados de brujería y contra Dios. Nadie en realidad los escuchaba, supongo que los ignoramos y se fueron. Si lo buscas, puede que encuentres algo.
Una de las personas convencidas de que “Gokú” significa “posesión demoníaca”.
-La película “Dragon Ball Evolution” cumplió 10 años este 2019. Recuerdo que el guionista emitió unas disculpas luego de que lo contactaras, dijo que la culpa (de que la película haya sido tan mala) es suya. Considerando cuán profundamente arraigada está la cultura asiática en “Dragon Ball”; ¿es posible que esta historia obtenga una adaptación fiel en Hollywood?
Sí, creo que es posible. Solo se requiere de un fan que entienda la cultura de “Dragon Ball” y se mantenga fiel a la intención de Toriyama, y allí es donde “Dragon Ball Evolution” falló, intentó adaptarla en una estructura tradicional de Hollywood y se volvió genérica, aburrida y para mi fue un golpe contra todo lo que los fans de “Dragon Ball” aman de la serie. Hasta hoy los fans la consideran una de las peores películas hechas. El guionista dice que acepta la culpa, pero en realidad fue (responsable) el sistema de Hollywood de productores y directores, que no estaban bien versados en el manga o en el anime, y solo tiraron todo lo que hace de “Dragon Ball” algo genial a la basura y dijeron: “haremos algo distinto”. Por supuesto, todos lo odiaron. Si de verdad entiendes “Dragon Ball” y su cultura, y sabes cómo escribir bien, es enteramente posible. Hemos visto adaptaciones exitosas de anime a la acción real, puedes ver “Matrix Revolution” y ver que las peleas en medio del aire son posibles. Todo lo que necesitas para una buena película es posible, solo necesitas alguien, como yo, que ha pasado décadas en entender esta serie para escribirla; y un productor y director que respeten el material original. Y entonces puedes hacerlo.
Piloto de “Dragon Ball Z: Light of Hope”; webserie no vinculada a Toei Animation o Toriyama escrita por Padula.
-¿Es Gokú un héroe? Lo pregunto porque en “Dragon Ball Super” él solo quería pelear con oponentes fuertes; mientras que salvar a los universos parecía ser, digamos, la prioridad número dos.
No, no diría que Gokú intenta ser un héroe. Él no pelea por salvar a otras personas, él pelea para superarse a sí mismo. Cuando entrena, siempre piensa “¿cómo puedo llegar al siguiente nivel?” y cuando pelea con alguien, esa es la oportunidad de probarse a sí mismo y ver si puede ir más allá. … y el resultado final es que, a veces, salva a otras personas o salva al planeta. Pero ese no es su objetivo. No tiene la misma perspectiva de Superman o Batman de resolver perjuicios y poner gente mala en la cárcel o castigar a otras personas para defender un sentido de justicia. Gokú va por ahí entrenando, sin intentar molestar a otras personas, pero resulta que todos estos extraterrestres y gente mala van a atacarlo; lo cual es un concepto budista y taoísta de la generación mutua e inhibición mutua, según el cual mientras intentes mejorar como persona, habrá fuerzas que intenten detenerte, suprimirte y mantenerte abajo. En “Dragon Ball” esto es plasmado por medio de artes marciales e inspirado por “Peregrinación al oeste”, con las 81 tribulaciones. Toriyama toma este concepto y lo hace amigable para niños al convertirlo en una serie de artes marciales e incorporar torneos. Es una escalada de eventos muy fácil de entender: Goku empieza como un niño, luego entrena con un maestro, entra al torneo, pelea, se vuelve más fuerte y la escala sigue incrementándose hasta el punto en el que estamos ahora; donde no tienes solo un universo, sino un multiverso de todos estos guerreros distintos que son fuertes como los dioses o incluso más..
-¿Puede “Dragon Ball” continuar después de la inevitable muerte de Akira Toriyama?
(Padula guarda silencio unos segundos) Puede, pero no creo que sea lo mismo. Ahora Akira Toriyama le da ideas a su protegido, Toyotaro (dibujante del manga de “Dragon Ball Super”), que es un joven autor de manga que creció con “Dragon Ball”; estaba obsesionado con eso. Akira Toriyama le da las ideas para la serie y, ocasionalmente, le enseña a dibujar algunas cosas o cambiar la apariencia de un personaje, pero es en realidad Toyotaro quien hace la mayor parte de trabajo. Así que siento que puede llevar el proyecto, pero la pregunta es otra: si Toriyama no está allí para darle ideas ¿puede hacerlo solo? esa es una pregunta cuya respuesta no conozco, no lo sabremos hasta que ocurra. Diría que Akira Toriyama es un genio y sería difícil de reemplazar o tal vez imposible, alguien que es un producto de su ambiente, creció en los 60 y 70 en Japón y esa cultura que absorbió de joven es lo que puso en “Dragon Ball”. Cualquiera que intente crear un nuevo “Dragon Ball” sería alguien que creció en un ambiente y tiempo distintos y ellos estarían poniendo un tipo de cultura distinta en la serie. No sería lo mismo, pero podría tan bueno o mejor, porque es diferente. “Dragon Ball” tiene que evolucionar, pero sería una sensación distinta y el truco para el nuevo autor sería si puede expresar la misma alegría de los años 80 sin hacerlo oscuroni muy enfocado en relaciones complejas entre personajes y retener esa calidad fácil de entender que hace popular “Dragon Ball”. Si lo hacen así, como si fuera hecho aun en los 80, entonces la gente podría decir que “Dragon Ball” puede vivir sin Akira Toriyama. Pero si intentan hacer algo propio, sería menos popular.
LA POPULARIDAD DE DRAGON BALL SEGÚN GOKÚ Y VEGETA
Extracto del libro de entrevistas “Dragon Soul: 30 Years of Dragon Ball Fandom”, de Derek Padula (traducción propia)
“Dragon Ball es mágico, no solo en Japón, sino en todo el mundo. No sé por qué, pero “Dragon Ball” se basa en Gokú, así que creo que tiene que ver con la personalidad de Gokú: su mezcla de inocencia y habilidades de pelea. La clave es que él nunca se rinde. Primero es una aventura humorística y Gokú es juguetón, pero luego él y sus amigos deciden dar sus vidas si es necesario defender el planeta, su gente y sus familias. Así que hay un cambio de tono mientras la serie continúa y la gente creció con ello”.
Mario Castañeda, voz de Gokú en América Latina
"Hablando específicamente de los fans de América Latina, creo que esta generación tenía algo en común. Usualmente tenían una vida familiar muy difícil, vivían en guetos y no tenían muchas oportunidades en la vida. Pero encontraron estos valores en el anime, y en “Dragon Ball” las familias son muy cercanas. Por ejemplo, Vegeta no es mal padre, es un buen padre. ¿Qué hace que este anime sea tan grande? Creo que es la conexión con esta generación de chicos. No la pasaban bien aquí”.
René García, voz de Vegeta en América Latina
DATO
Dos de los libros de Derek Padula” han sido traducidos al español.