"Game of Thrones": recordamos las maldades del rey Joffrey
"Game of Thrones": recordamos las maldades del rey Joffrey
Redacción EC

¡Larga vida a ! El joven irlandés se retiró de la actuación (hasta nuevo aviso) después de interpretar al niño-rey Joffrey Baratheon en la serie . El día de su boda, con Margaery Tyrell (), terminó su cruel reinado al ser envenenado. El episodio, emitido ayer, resaltó todos sus defectos ya que, de principio a fin, se mostró como el pequeño déspota que era: vertiendo una copa de vino sobre su tío Tyrion (), ordenando una ofensiva justa entre enanos, etc.

En honor a este personaje, que todos amaron odiar, recordamos los cinco mejores momentos de sus maldades.

1. LA MUERTE DE NED

En este momento, Joffrey demostró quién era en realidad. Los televidentes no se esperaban que Ned Stark (Sean Bean) falleciera decapitado después de que el joven rey prometiera clemencia. Esto le valió el título del hombre más odiado de la serie por los seguidores de la misma. .

2. EL ASESINATO DE ROS

Los fetiches del rey salieron a la luz en su cumpleaños. Tyrion envío un par de prostitutas a su cuarto, pero todo acabó mal para ellas. Joffrey no solo le ordenó a una, Ros, de que le pegara a la otra sino que, más adelante, terminó siendo utilizada para que el rey practicara puntería con su ballesta. .

3. LAS TORTURAS DE SANSA

¿Qué no ha sufrido Sansa Stark (Sophie Turner) a manos del que fuera su prometido? Primero fue obligada a contemplar la cabeza de su padre en una pica, luego fue golpeada por guardias y desvestida frente a su corte; finalmente Joffrey amenazó con violarla. La pobre sufrió demasiado a manos del rey. .

4. LOS HIJOS DE ROBERT

Luego de que surgiera el "rumor" (porque es verdad) de que Joffrey era en realidad hijo de Cersei y Jaime Lannister, el joven mandó matar a todos los bastardos de su "padre" Robert Baratheon. .

5. LOCURAS DE GRANDEZA

Los ánimos están caldeados en la capital. El pueblo tiene hambre y miedo de un posible asedio. Durante un recorrido, al joven rey le arrojan estiércol. Él no atinó a nada mejor que pedir que maten a todos los que estén alrededor. Obviamente, el pueblo contestó con una revuelta. .

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