La moda del selfie stick ha llegado para quedarse y son cada vez más personas las que los usan para retratarse. Sin embargo, pese a su utilidad, decenas de lugares turísticos los han prohibido para garantizar la seguridad de sus instalaciones y visitantes.
El MoMa y el Guggenheim de Nueva York, el Smirhsonian’s Hirshhorn Museum y el Smithsonian’s National Air and Space Museum en Washington D.C. y el Museum of Fine Arts en Boston son algunos de los museos que han vetado el uso de este dispositivo en sus instalaciones.
El motivo principal que llevó a los encargados de estos lugares a prohibir los selfie sticks es, básicamente, que pueden llegar a dañar las obras de arte si son usados sin el cuidado necesario y que interrumpen el libre tránsito de los demás turistas especialmente en horas pico.
Otros espacios donde no se pueden usar los selfie sticks son algunos de los estadios donde se juegan partidos de la Premier League en Inglaterra, pues se los considera como “potenciales armas” en caso de altercados violentos entre el público.