Un hombre armado que mantenía a 30 personas como rehenes en un centro comercial de la ciudad de San Juan, Filipinas, se rindió y se entregó a la policía. Se trata de un ex agente de seguridad del centro comercial, quién fue despedido y tomo la decisión de realizar el secuestro porque consideró su despido “injusto”. Fuente: [TV Perú]