El paisaje de Irak adoptó una tonalidad anaranjada el fin de semana con la llegada de una nueva tormenta de arena. El fenómeno, cada vez más habitual, ha aumentado la cantidad de hospitalizaciones por problemas respiratorios y provocó la suspensión de vuelos. (Fuente: AFP)
El paisaje de Irak adoptó una tonalidad anaranjada el fin de semana con la llegada de una nueva tormenta de arena. El fenómeno, cada vez más habitual, ha aumentado la cantidad de hospitalizaciones por problemas respiratorios y provocó la suspensión de vuelos. (Fuente: AFP)