Errores comunes con el sostén que las mujeres solemos cometer

La próxima vez que abras tu cajón de ropa interior, fíjate en tus sostenes. ¿Cuántos tienes y de esos cuántos necesitan un cambio? ¿Qué tan seguido usas unos a comparación de otros? Esas preguntas pueden ayudarte a evitar algunos de los errores más comunes referentes a ellos.

Aunque incómodo y detestado por muchas, el sostén es una pieza clave en el guardarropas de una mujer. Es la base sobre la cual vamos a vestir el cuerpo y su misión no es solo mantener los senos en su lugar, sino estilizar la figura y resaltarla.

¿Qué tan bien usas tu sostén? Estos son algunos de las equivocaciones que solemos cometer las mujeres.

1. Lo usas demasiado

¿Sabes cuál es el tiempo de vida de un sostén? En promedio es de 8 meses. El uso constante y las lavadas van desgastando los elásticos y las copas, perdiendo su capacidad de mantener todo en su lugar. Por eso tampoco es bueno que uses el mismo sostén tan seguido.

2. No piensas a la hora de comprarlo

Es un error común: solo vemos un modelo bonito y lo llevamos a la caja. Lo ideal es pensar siempre con qué prendas lo podrás usar y qué tan versátil puede ser.

3. No le das el cuidado necesario

Para que tu sostén dure mucho más tiempo, debes empezar por darle el cuidado que se merece desde el primer día. Lávalo a mano con jabón y no lo estrujes. Al guardarlo, no lo hagas doblado ni aplastado para que las copas no pierdan su forma.

4. Abusas de un estilo

Si en tu ropero solo tienes push-ups o saltas al otro extremo abundan los sostenes deportivos, estás en problemas. Lo ideal es ir variando según la ocasión y el nivel de comodidad que estás buscando, sin olvidar que tenga buen soporte y resalte tu figura.

5. La talla no es la correcta

Error típico de las mujeres que no se dan el trabajo de probárselo al comprar o lo hacen por internet. Al igual que los pantalones, las tallas pueden varias según la marca y por eso hay que verlo puesto.

6. La banda trasera está mal posicionada

Una consecuencia de un sostén de talla equivocada es que la banda trasera queda sobre la altura de la copa. Ese desnivel hace que el soporte sea deficiente y sea incómodo para ti, ya que estarás todo el tiempo tratando de acomodar la banda sin éxito.

7. Priorizas el aspecto

Por muy lindo que sea un sostén, si es que no es 100% cómodo y te sientes insegura con él es mejor que no lo compres. El aspecto es importante pero no debe ser tu motor para llevarlo a casa, sino el qué tan bien luce en tu cuerpo.