Lucero Yrigoyen M. Q.
Si tu perra está embarazada, siempre la mejor opción será el parto natural. A menos que su salud o la de sus crías estén en riesgo, se recomienda elegir la cesárea.
Los veterinarios Juan Carlos Tong y Francesca Guerrero recomiendan este procedimiento quirúrgico cuando hay alguna condición que obstruye el canal del parto, anormalidades en los fetos, falla parcial o total de contracción uterina, dilatación cervical incompleta, tamaño excesivo del feto o su mala posición. También cuando se presentan irregularidades en la pelvis materna, tejidos blandos en el canal del parto o en algunas razas braquicéfalas, porque tienen la pelvis pequeña y estrecha, como en la Boston terrier, bulldog inglés y francés.
La cantidad de crías que la madre está gestando no determina el tipo de parto, aunque así se crea. En la mayoría de casos, si se trata de un solo cachorro, este suele ser muy grande y el veterinario deberá evaluar si es riesgoso que pase por el canal del parto.
Por el contrario, si la futura madre tiene una gestación múltiple, podría suceder que la musculatura del útero se debilite por el excesivo trabajo de parto y no tenga capacidad para contraerse y expulsar a las crías en un tiempo aceptable, lo que sería muy peligroso tanto para la perra como para sus hijos.
Apuntar la fecha en que tu perra quedó embarazada, resulta útil en los controles. En algunas consultas el veterinario pedirá que se le haga ecografías para estimar la cantidad de crías, la fecha probable de parto y conocer si los cachorritos nacerán con algún problema de salud.
CUIDADOS
Cualquier perra, sin importar la raza, puede llegar a necesitar una cesárea. Además de aquellas que por su anatomía tienen un canal pélvico estrecho y el cráneo grande o braquicéfalo, las hembras que son muy engreídas y sobreprotegidas por su familia, pueden necesitar la intervención porque se ponen muy nerviosas en el momento del parto.
No te preocupes si el veterinario te recomienda que tu engreída sea sometida a una cesárea, pues es una operación muy sencilla, dura pocos minutos y se realiza con anestesia general para evitar que la mascota se inquiete. Además, las drogas que se usan no atraviesan la barrera placentaria y, por lo tanto, no afectan a los futuros cachorritos.
Lo que sí es muy importante es que no desatiendas los cuidados que le des después de la intervención. Vigila la herida de la operación y hazle curaciones en la zona con el producto desinfectante que el veterinario te recomiende. También preocúpate de que no pierda el apetito y que tome suficiente agua para recuperar el líquido que perderá al amamantar a sus cachorros.