Ninguna mascota está libre de contraer una infección por hongos. Por eso, aquí te contamos todo lo que debes saber sobre las infecciones fúngicas de la piel que afectan a los perros.
Recuerda que, si sospechas que tu mascota podría tener hongos, lo más importante es recurrir a un médico veterinario para dar con el diagnóstico y tratamiento adecuado.
Infecciones fúngicas de la piel
(Foto: U.P Cayetano Heredia)
Según el portal especializado en cuidados veterinarios, PetMD, existen dos tipos comunes de infecciones fúngicas que afectan la piel de los perros.
La tiña es una de ellas. Esta puede afectar la piel, el pelaje e, incluso, las uñas de un perro. ¿Cuáles son sus síntomas?
- Pérdida de cabello.
- Picazón.
- Piel escamosa o con costras.
- Uñas deformes o quebradizas.
“Si bien debe tratar cualquier infección lo antes posible, el tiempo es esencial con la tiña porque puede propagarse fácilmente a otros animales domésticos y humanos”, explica Andrew Rosenberg, veterinario de la Clínica de Dermatología Veterinaria de Riverdale.
¿Cómo se diagnostica? Para dar con esta infección cutánea, que también afecta a las personas, el veterinario debe realizar un cultivo fúngico de células del cabello o de la piel, o un examen microscópico de una muestra de cabello.
“Dependiendo de la gravedad de la infección, la tiña se puede tratar con baños y baños medicados y/o medicamentos antimicóticos orales. Pasar la aspiradora y desinfectar la casa también ayudará a disminuir las posibilidades de que la tiña se propague entre las mascotas y las personas”, agrega PetMD.
Otra de las infecciones más comunes es la candidiasis cutánea, que se puede originar ante el crecimiento excesivo de levaduras en el cuerpo de un perro.
¿Cuáles son sus síntomas? Según AniCura, los perros con infección por levaduras pueden presentar picazón y enrojecimiento de la piel en algunas zonas específicas del cuerpo.
El tratamiento normalmente involucra un fármaco antiséptico o antifúngico aplicado a la piel. Además, los medicamentos orales pueden ser necesarios en casos severos.
“A diferencia de la tiña, la candidiasis no es contagiosa para otras mascotas o personas”, recalca PetMD.
Prevenir antes que lamentar
Si tu mascota se rasca constantemente, y presenta enrojecimiento en algunas zonas de su piel y/o pérdida de cabello, llévala a un veterinario cuanto antes. Lo mejor, en este caso, es recurrir a un especialista en dermatología.
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