En pocas palabras, la empatía es la capacidad de ponerse en los zapatos del otro. Es decir, es la capacidad de entender el sentir o el sufrimiento de la otra persona. Nosotros dejamos de ser el centro y se prioriza el bien común.
“Para que uno pueda ser empático tiene que saber relacionarse con los demás”, expresó la directora del departamento de psicología y psicotereapia de SANNA Clínica San Borja, Ruth Kristal Mitastein, a Bienestar del Diario El Comercio.
La especialista manifestó que la capacidad de empatía se desarrolla en el primer vínculo que tenemos como seres humanos, es decir, la relación mamá-bebé. En base a la interacción en esta relación, el niño aprende a detectar los sentimientos de los otros.
¿Por qué debemos ser más empáticos en un contexto de crisis?
“En este momento el país está tan convulsionado que uno tiene que entender que hay mucha gente que está sufriendo muchísimo y existe mucha falta de necesidades básicas”, señaló Kristal. Agregó que es fundamental entender las motivaciones del otro pero no fomentar el descontrol.
Los adultos son quienes tienen la gran responsabilidad de enseñar a los pequeños que debemos tener sensibilidad sobre lo que le está pasando al otro. Pues la falta de empatía genera que uno se centre en sí mismo y se interese solo por su propio bienestar.
En una situación como la que actualmente atraviesa el Perú, es necesaria la empatía para pensar en el bien común, sobre todo, en el bien nacional. Cuando uno no es empático se desconocen las necesidades del otro y se ignoran otras formas de pensar.
Por último, la especialista recalcó que es importante establecer este vínculo humano en el que se reconozcan los sentimientos del otro. Las personas empáticas tienen la capacidad de entender lo que está sucediendo a su alrededor, comprender a los demás y aceptar diversas opiniones; todo ello nos permite vivir como sociedad y crecer como personas.