El homesickness o síndrome de la añoranza es un estado emocional que surge como resultado de hacer frente a nuevas situaciones y la nostalgia que produce el estar lejos de casa. Si estás atravesando por esta situación, recuerda que no estás solo y siempre hay una forma de superarlo.
Este síndrome es un estado de ánimo natural que afecta a muchos de forma física y emocional. Pero hay formas de apaciguar estas emociones y empezar a sentirte cómodo en tu nuevo hogar. Una clave fundamental para lidiar con este sentimiento es revisar los aspectos positivos de estar en un nuevo lugar.
¿Cuáles son los síntomas?
- Falta de apetito, acompañada en ocasiones de pérdida de peso.
- Dificultades para conciliar el sueño o que este sea reparador.
- Tristeza y sensación de desesperanza (sin que aparezca una causa específica).
- Baja autoestima y elevada autocrítica.
- Sensación de cansancio y fatiga.
- Pensamientos negativos y aislamiento social.
¿Qué puedo hacer frente a este sentimiento?
- Mantente ocupado. Crea una rutina que te permita descubrir nuevos lugares, amigos y te aleje de los pensamientos de nostalgia.
- Practica un deporte. Cuando te ejercitas, liberas energía, piensas con claridad y te mantienes activo.
- Haz del nuevo lugar tu hogar. Selecciona elementos decorativos o simbólicos que representan parte de lo que era tu hogar y que al momento de mirarlos te traigan energía y familiaridad.
- Mantén el contacto con tus seres queridos. Tener un momento de conexión con nuestro hogar nos permite reducir los sentimientos de añoranza
- Crea tu red de apoyo. Contar con gente que te escuche y se identifique con tus emociones es clave para hacer menos pesada la distancia.
- Encuentra nuevas actividades. Descubre todo lo que puede ofrecerte tu nuevo hogar, así tendrás una motivación extra para levantarte.