Seguramente has escuchado a algún familiar o amigo decir ‘¡él siempre cree que está enfermo! ¡es un hipocondríaco!’, pero ¿es tan simple como eso? Según la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI), la hipocondriasis es una afección por la que el paciente cree infundadamente que sufre de alguna enfermedad grave. No obstante, esta condición va mucho más allá de su significado, pues se va desarrollando debido al ambiente en el que crece el paciente y las personas con las que convive durante su crecimiento.
“El trastorno de ansiedad por enfermedad, también conocido como hipocondría o hipocondriasis, es una condición crónica en la que una persona tiene un miedo infundado y persistente de padecer una enfermedad grave. A menudo, estas preocupaciones persisten a pesar de las evaluaciones médicas que no muestran una condición médica seria. Las personas con este trastorno pueden interpretar incorrectamente funciones corporales normales o síntomas menores como indicativos de problemas de salud graves. La preocupación por la salud se convierte en una característica central de la vida del individuo, interfiriendo significativamente con su funcionamiento diario y bienestar emocional”, estableció el Dr. Adam Borland, psicólogo clínico de Cleveland Clinic.
Es crucial ahondar en el origen y el tratamiento de esta enfermedad, pues la hipocondriasis no tratada puede tener consecuencias para la salud general y el bienestar de la persona. “El estrés y la ansiedad constante, relacionada con la preocupación por la salud, puede debilitar el sistema inmunológico y aumentar el riesgo de desarrollar problemas de salud física u otras enfermedades de la salud mental”, destacó la Dra. Alexandra Luz Ruiz Martínez, médico y docente de la Universidad Norbert Wiener.
“Asimismo, la búsqueda excesiva de consultas médica puede resultar en limitación en otras esferas como la familiar, personal y laboral, además de que se realizan procedimientos médicos innecesarios y un gasto considerable de recursos económicos en la búsqueda de atención profesional”, añadió la Dra. Ruiz Martínez.
¿Por qué se origina la hipocondriasis en una persona?
De acuerdo con el Dr. Borland, las causas exactas de este trastorno son desconocidas, pero se cree que se origina debido a una combinación de factores psicológicos, biológicos y ambientales. Sobre todo, una de las causas principales se encuentra en la historia familiar del paciente, como padres o hermanos que hayan sufrido del mismo problema, lo cual puede le haber ‘contagiado’ el nerviosismo o el negativismo.
En ese sentido, la Dra. Ana María Lazo, psiquiatra de SANNA Clínica El Golf, también añadió a la lista las siguientes causas probables:
- Haber presenciado de cerca la enfermedad de un ser querido, más aún si esta afección estuvo relacionada con una pérdida de la salud abrupta y/o no explicable completamente.
- Crecer y desarrollarse en un entorno muy sobreprotector, el cual generalmente está relacionado a un espacio que pueda ser un potencial generador de ansiedad.
- Las creencias de los progenitores, pues se ha visto que las inclinaciones infundadas de los padres son las que influyen y generan ideas disfuncionales en los hijos. Entre ellas, se encuentran la pobre tolerancia a la incertidumbre o sobredimensión de la amenaza. Estas son características importantes, pues influyen directamente en moldear el pensamiento crítico, principalmente en relación a las creencias disfuncionales que pudieran aparecer a lo largo de la vida.
“Del mismo modo, otro hecho que es muy importante recordar es que en el trípode de la salud mental, encontramos 3 parámetros imprescindibles: genética, personalidad y experiencias de vida, y son una combinación de cualquiera de ellos lo que puede generar potencialmente un problema de salud mental”, recalcó la experta de SANNA Clínica El Golf.
La Dra. Lazo también añadió que, en la mayoría de casos, la hipocondriasis suele aparecer en adultos jóvenes, lo cual se debe a que están terminando de transitar la adolescencia y empezando la adultez, por lo que tienen mayor acceso a los servicios de salud que soliciten y la libertad de acudir múltiples veces a ellos. “Sin embargo, también es posible que este trastorno aparezca desde la infancia y persista hasta la adultez mayor”, agregó.
¿Cuáles son los síntomas de la hipocondriasis?
Es importante tener en cuenta que los síntomas de la hipocondriasis van a variar en intensidad y presentación en cada paciente, pues dependen de la genética, personalidad, dinámicas externas, experiencias de vida o eventos traumáticos que puedan predisponer su aparición, conforme a lo explicado por la Dra. Ruiz Martínez. “Sí existen algunos síntomas que son más comunes en la mayoría de hipocondríacos, pero no es obligatorio que absolutamente todos los afectados los padezcan”, aclaró la doctora.
Entre los más comunes, la experta de la Universidad Norbert Wiener incluyó los siguientes:
- Preocupación constante, intensa e irracional por su salud
- Búsqueda frecuente de información médica
- Evitar situación que podrían desencadenar ansiedad sobre la salud
- Interpretación exagerada de síntomas físicos normales
- Gran dificultad de aceptar la negativa de la presencia de la enfermedad por parte de profesionales de la salud
Dentro de las señales, la Dra. Lazo sostuvo que las palabras claves para identificar los síntomas son ‘fatalidad’ y ‘gravedad’, pues el paciente no está pensando que padece una enfermedad pasajera, sino que lleva su pensamiento al extremo, llegando a convencerse de que lo que tiene es una afección grave, mortal y que nadie -ni siquiera los médicos más expertos- son capaces de detectarla. “Es por ello que son usuarios que recurren muchas veces a múltiples atenciones en salud con los mismos especialistas e inclusive con especialidades muy específicas, pues están convencidos de su situación”, recalcó la especialista en psiquiatría.
De todas formas, cabe aclarar nuevamente que no todos los pacientes experimentan los síntomas de la misma manera. “El nivel de ansiedad y los comportamientos específicos de cada persona hipocondríaca pueden diferir”, aseveró el Dr. Borland.
¿Cuáles son los tratamientos disponibles para una persona hipocondríaca?
El tratamiento generalmente implica psicoterapia. “La primera opción sería derivar al paciente a terapia cognitiva conductual (TCC), la cual consiste en ayudar al paciente a que se centre en cambiar los patrones del pensamiento y conducta, los cuales contribuyen a la preocupación excesiva por la salud”, señaló.
“Aunque los tratamientos para mejorar este trastorno son múltiples, debemos considerar que todos se basan en dos aristas muy importantes. En primer lugar, una es la intervención psicoterapéutica, la cual se maneja bajo la terapia cognitivo conductual. Es fundamental que aquel abordaje logre cuestionar y poner ‘en duda’ la idea fija que esté presentando el paciente. Por otro lado, el segundo punto hace referencia a la parte farmacológica, en la que se logrará controlar principalmente los síntomas ansiosos, regulando la parte química que podría estar generando un descontrol en los pensamientos de la persona hipocondríaca”, declaró la Dra. Lazo.
En relación al lado farmacológico del tratamiento, el Dr. Borland mencionó que ciertos medicamentos, como los antidepresivos, pueden ser bastante útiles para controlar los síntomas de ansiedad y depresión asociados. Por ello, la colaboración entre médicos y psicoterapeutas es crucial para asegurar un enfoque integral del tratamiento.
Gracias a esta metodología, en palabras de la Dra. Ruiz Martínez, el paciente puede desafiar y reevaluar sus creencias irracionales a largo plazo, así como aprender técnicas para manejar su ansiedad y preocupación constante. “La terapia le permitirá generar estrategias para enfrentar sus miedos de una forma más saludable. Si bien la hipocondriasis puede manejarse y mejorar con el tratamiento adecuado, también es posible que persista a largo plazo, aunque en menor medida”, asintió la docente de la Universidad Norbert Wiener.
¿Cuáles serían las consecuencias si la hipocondriasis no se trata correctamente?
Como primer punto, si la enfermedad no se trata correctamente, el trastorno de ansiedad por enfermedad puede provocar múltiples consecuencias negativas en la vida del paciente, como aislamiento social, problemas económicos debido a gastos médicos frecuentes -e innecesarios- y dificultades en las relaciones interpersonales y profesionales. “Igualmente, la preocupación constante y el estrés pueden tener efectos negativos en la salud física y mental, aumentando el riesgo de aparición de otras afecciones, como la depresión”, especificó el Dr. Adam Borland.
“Debemos generar conciencia y educar a una población que cuide su salud mental con la misma naturalidad con la que cuida su salud física. Si logramos que más personas saquen su cita en psiquiatría como lo hacen con cardiología, podremos abordar y curarlas a tiempo. Todos podemos ir al psicólogo o al psiquiatra y no tiene absolutamente nada de malo hacerlo”, compartió la Dra. Lazo.
En segundo lugar, la Dra. Ruiz Martínez indicó que la hipocondriasis puede conducir a la automedicación, pues el paciente suele intentar aliviar los síntomas percibidos por su cuenta, buscando salidas o recursos en redes sociales u otros.
Es preciso enfatizar que el Seguro Social de Salud (EsSalud) publicó que autodiagnosticarse es una enfermedad y automedicarse es exponer al organismo a efectos adversos, como dolor de cabeza, somnolencia, náuseas, diarrea, urticaria e incluso consecuencias más graves, como la dependencia y adicción a los fármacos.