El Metro de Rusia comenzó a funcionar en 1935 y, en ese entonces, movilizaba a 285 mil personas. 80 años después, este sistema de transporte subterráneo cuenta con 12 líneas en las que se trasladan 9 millones de pasajeros. A pesar del tiempo, este medio sigue siendo un reflejo del podería económico del gobierno, por la opulencia de la arquitectura de sus estaciones.
Pero puede que el ajetreo diario y el alto volumen de pasajeros, haya hecho que esa suntuosidad haya quedado en segundo plano. Sin embargo, el fotógrafo David Burdeny quizo rescatar ese lujoso pasado de las estaciones del Metro de Rusia y creó su proyecto "A Bright Future", que retrata varias de las paradas del subterráneo en horas de la noche y las compara con edificios locales que por sus lujos parecen ser propios de la realeza.
Contempla el resto del trabajo del fotógrafo David Burdeny en su página http://www.davidburdeny.com/