En todo hogar siempre hay un librero que no solo sirve para almacenar las obras literarias que más nos gusten sino que también es una forma de decorar el espacio. Y si de libreros se trata, los diseños son muy variados desde simples hasta más innovadores.
Los diseñadores Agusta Magnusdottir y Gustav Johannsson de Agustav crearon esta curiosa repisa para libros donde estos flotan sostenidos por unas cuerdas especiales que también sirven como separadores de página. Estos se pueden mover por toda la base de madera permitiendo crear la forma que se quiera con ellos.
Al final de cada una de las cuerdas hay una pequeña base de madera que ayuda a cuidar las páginas de los libros. Hay dos modelos, el tradicional para doce libros y el mini para seis, que pueden adquirirse en madera de roble o nogal.