Japón es un país con tradiciones muy arraigadas que no solo se notan en sus costumbres sino también en su arquitectura. Las casas de té son un tipo de construcción típica del país y que se mantienen hasta hoy.
El diseñador Tokujin Yoshioka le dio un giro a estas casas construyendo una hecha toda de vidrio en lo alto de un templo budista en la ciudad de Kyoto. Esto permite a los visitantes poder apreciar mejor la ceremonia del té y acercarse a las costumbres japonesas.
El plan de Yoshioka es mover esta casa por todo el mundo. Por el momento, las personas que lleguen hasta ahí podrán disfrutar de su belleza y el paisaje que la rodea.