Todos tenemos dos personalidades en nuestras vidas: la seria durante el día y la alocada y divertida durante la noche. Lo mismo ocurre con la Disco Chair producida por el estudio de diseño londinense Kiwi & Pom que promete devolverle la vida a la casa más oscura y tradicional.
La idea detrás de este proyecto era construir un mueble que fuera funcional de día pero que en la noche cobrará vida nueva. Esta silla fue realizada con 200 metros de alambre electroluminiscente que se ilumina una vez que es enchufado irradiando una luz de distintos colores.
Estos alambres fueron colocados alrededor de una base de acero para que obtenga su forma y soporte peso. La luz se programa para que se mantenga encendida o para que parpadee dándole un efecto de la época disco al espacio.