En casa tenemos algunos artículos de los cuales queremos deshacernos pero no sabemos bien qué hacer con ellos. Algunos son reciclables pero otros requieren un tratamiento especial para poder ser reutilizados o, simplemente, terminan siendo inservibles.
Las computadoras son un ejemplo de esos desperdicios, cuyo reciclaje implica un trabajo de desmantelar cada aparato, separar las piezas internas en plásticos y metales y el desecho del material inservible. O, como demuestra el estudio BRC Design, puedes darles nueva vida usando sus partes en su estado actual.
En su colección Binary, los diseñadores del estudio tomaron los chips y cables internos de las máquinas para decorar sus sillas, espejos, aparadores y sofás. El esqueleto de cada mueble también está hecho con los CPU de las máquinas que han sido separados y unidos nuevamente con metal para que tengan una forma distinta.
Algunos objetos de la colección están elaborados con solo un tipo de pieza. Es el caso de la alfombra hecha con cables tejidos para lograr un acabado elegante. Otras incorporan más tecnología como el espejo que usa una cámara para proyectar el reflejo en una pantalla LED.