El diseño se pone al servicio de la naturaleza. Los estudiantes de la Academia de Arte de Estonia intervinieron un bosque con tres megáfonos de madera para amplificar sus sonidos y convertirlo en un espacio de relajación.
La intervención artística se titula Ruup y busca acercar al público a la naturaleza. No solo les ofrece la oportunidad de disfrutar de los sonidos del bosque, también de emplear los megáfonos de tres metros de diámetros para realizar actividades culturales o meditativas.
Pensando en los amantes del aire libre, los estudiantes construyeron los megáfonos de forma cónica y que sirvan como refugio para las personas fanáticas de las caminatas o campistas.
La intervención Ruup será solo temporal, pero es una oportunidad especial para escuchar todo lo que la Madre Naturaleza tiene para decir.