Hoy más que nunca el mundo necesita de la cultura y el arte. Por eso la República Federal de Alemania considera el trabajo cultural como el tercer pilar de su política exterior. En ese sentido, el 50 aniversario de su presencia en el Perú, que el Goethe-Institut celebra este año, nos motiva a reflexionar sobre el rol y la relevancia del trabajo cultural. En todo este tiempo no solo hemos sido el más importante y dinámico agente de difusión de la cultura alemana en el Perú, sino que también hemos tratado de ser un centro cultural involucrado con el país que nos acoge con su quehacer artístico y educativo. Desde entonces nuestras actividades han reunido año tras año a artistas, estudiosos y público muy diverso en un vital intercambio de saberes entre el Perú y Alemania, entre Europa y Latinoamérica.
El reto para el trabajo cultural hoy (y lo será mucho más en el futuro) es encontrar nuevas formas de coproducción a nivel global. Fortalecer las redes que ya hemos venido creando en la región sudamericana, y construir nuevas. Necesitaremos aprovechar más los nuevos medios e implementar estrategias digitales, así como desarrollar formatos que permitan el encuentro entre personas de diferentes culturas en todo el mundo. Tenemos que dejar de pensar en un paradigma bilateral y apuntar mucho más a pensar globalmente en todos los niveles.
En el Goethe-Institut hemos identificado tres líneas de acción. Primero, apoyar el desarrollo de nuevas formas de participación en la sociedad; después, pensar más en el potencial del espacio urbano. Y el tercer punto, importante para quienes trabajamos en cultura, es interrogarnos, como agentes culturales, sobre cómo podemos influir para cambiar o mejorar el porvenir.
Contenido sugerido
Contenido GEC