Giovanni Galli, representante de las víctimas, aseguró que los ladrones usaron una soga para bajar desde la terraza hasta el balcón del piso 8.
Giovanni Galli, representante de las víctimas, aseguró que los ladrones usaron una soga para bajar desde la terraza hasta el balcón del piso 8.
Juan Guillermo Lara

Un grupo de delincuentes ingresó a dos departamentos de un edificio ubicado en la zona de El Golf, en el distrito de , y se llevó joyas y relojes de alta gama valorizados –según los afectados– en más de US$1 millón. El robo ocurrió el último fin de semana, cuando los propietarios se encontraban de vacaciones.

Giovanni Galli, representante de las familias víctimas del robo, precisó que en el primer departamento, de propiedad de un empresario extranjero, se robaron joyas y relojes de alta gama valorizados entre US$200 mil y US$250 mil.

En el segundo departamento, se llevaron una colección de 120 relojes y otros objetos. En total, indicó el vocero, lo robado en esta vivienda estaría valorizado entre US$1 millón y US$1,4 millones.

Galli también indicó que aún hay otros vecinos del edificio que no han regresado de sus vacaciones, por lo que podría haber otras víctimas de estos ladrones.

—El robo—

Los departamentos asaltados se ubican en los pisos 8 y 10 del edificio. Según la hipótesis de las víctimas, los hampones habrían ingresado desde el último piso de un inmueble contiguo que se encuentra en construcción.

“Desde allí [el edificio vecino en construcción] bajaron con una soga hasta el balcón exterior del departamento. En ese lugar, los peritos de la Policía Nacional encontraron huellas de zapatos e indicaron que los delincuentes habrían utilizado guantes, porque no había huellas dactilares”, dijo Galli.

Los propietarios de los inmuebles exigieron a los representantes del consorcio formado por la constructora Palo Alto y F&P Inversiones, a cargo de la obra contigua, las grabaciones de sus cámaras de seguridad; sin embargo, no habrían recibido una respuesta. El Comercio intentó comunicarse sin éxito con estas empresas.

Galli denunció que la obra no tendría el sistema de videovigilancia exigido por la comuna. No obstante, la Municipalidad de San Isidro informó que el proyecto en construcción sí cuenta con las cámaras de seguridad requeridas y que fue fiscalizado en diversos momentos. Anunciaron que hoy se inspeccionará de nuevo la obra.

Según la Ordenanza 435-MSI, toda construcción debe tener un sistema de videovigilancia con una capacidad de grabación no menor de 48 horas. Además, el constructor debe mantener una copia de las grabaciones por lo menos treinta días y contar con un servicio de seguridad privada 24 horas.

Este Diario también buscó la versión de la PNP, que solo manifestó que la Dirección de Investigación Criminal (Dirincri) sigue con las investigaciones del caso.

Sepa más:

  • La Ordenanza 435-MSI establece una multa de 4 UIT (S/17.200) y la paralización de la obra si no se instaló un sistema de videovigilancia en la construcción.
  • Si el edificio no cuenta con un servicio de seguridad privada o mantiene en malas condiciones el sistema de videovigilancia, la sanción es de 2 UIT (S/8.600) y la paralización de la obra.

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