Se entregó a la justicia uno de los proveedores implicados en la red de corrupción que operaba internamente en la Municipalidad Provincial de Chiclayo. El empresario Luis Barrantes Piscoya, tras estar 20 días prófugo, se puso a disposición de la ley.
Junto a su abogado, Barrantes Piscoya, requisitoriado desde el 30 de setiembre, llegó hasta la sede del Ministerio Público de Lambayeque para entregarse. Las autoridades investigan por lavado de activos y asociación ilícita para delinquir a la red criminal liderada por el ex alcalde de Chiclayo, Roberto Torres Gonzales.
Al empresario se le acusa de haber utilizado a terceras personas como proveedores. Así, aparentemente, facturaba miles de soles en la comuna de Chiclayo por supuestas compras fraccionadas.
Sin tener negocios reales, Diana Carolina Otoya Whang y José Gregorio Gómez Guzmán, captados por José Luis Barrantes, cobraron más de S/.4 millones como proveedores. Ellos figuraban como dueños de ferreterías que no existían para la Sunat.
El empresario es el primer proveedor implicado que se entrega a la justicia. El poder Judicial dispuso prisión preventiva para los también proveedores Guillermo Plaza Arbulú, Víctor Cubas Llaguento y José Mires Rimarachín, quienes permanecen prófugos. Así como para los funcionarios de la red criminal denominada "Los limpios de la corrupción" Jorge Inchaústegui Samamé, Juan Valdivia Goicochea y Hugo Matallanta Peralta.