Perú Libre: ¿Por qué fracasó la aventura presidencial del partido del lápiz?

“Teníamos necesidad de pasar la valla [electoral] y por casualidad ganó Castillo”, reconoció el líder de Perú Libre, Vladimir Cerrón, en un evento con sus militantes el pasado 1 de julio, cuando todavía no estaba prófugo de la justicia.

A menos de tres años de la aventura presidencial que emprendió Perú Libre, Pedro Castillo cumple prisión preventiva por un golpe de Estado, Vladimir Cerrón se encuentra en la clandestinidad y la presidenta Dina Boluarte es investigada por los presuntos delitos de genocidio, homicidio calificado y lesiones graves.

“Asumieron el poder de casualidad y lo entregaron a la venta de cupos, de cargos públicos. Lo raro hubiese sido que ese tipo de coalición tuviese un futuro político mayor”, dijo el politólogo Mauricio Zavaleta.

“Fracasó porque fue fruto de la total improvisación”, agregó el analista político Enrique Castillo.

La fórmula presidencial que presentó Perú Libre para los comicios del 2021 con Castillo (presidencia), Boluarte (primera vicepresidencia) y Cerrón (segunda vicepresidencia) sufrió una baja previsible cuando la inscripción de este último fue declarada improcedente por contar con una sentencia judicial.

No obstante, el partido continuó con su objetivo político a corto plazo: pasar la valla electoral para no perder la inscripción; es decir, sobrevivir. Y para ello apostó por un líder sindical “que podía atraer el voto de los maestros” y “una mujer con un discurso político radical que podía acompañarlo”, apuntó Enrique Castillo.

Luego de una campaña atípica, en una coyuntura marcada por la pandemia del coronavirus, asumió el Gobierno sin preparación.

“En términos de improvisación y asociación con corrupción no están en la media. [...] Y lo que ha sido claro en el gobierno de Castillo es el descaro de no tener ningún interés en gobernar. El interés claramente era la repartición de poder con fines monetarios”, agregó Zavaleta.

En solo 17 meses de gobierno, Castillo se involucró en presuntos delitos de organización criminal, tráfico de influencias, colusión, abuso de autoridad, encubrimiento personal y cohecho. Y en diciembre del 2022 dio un golpe de Estado que lo llevó a prisión preventiva mientras lo investigan por rebelión.

ESTAS SON LAS INVESTIGACIONES QUE ENFRENTA EL EXPRESIDENTE:

En tanto, Boluarte asumió la Presidencia por sucesión constitucional, ya distanciada del partido Perú Libre, que la expulsó en enero del 2022 por discrepar públicamente con Cerrón.

ESTOS SON LOS CASOS CONTRA LA MANDATARIA:

Pero tras los primeros meses de gestión, la bancada de Perú Libre “se ha acomodado al poder para tratar de sobrevivir”, señaló el analista Enrique Castillo.

“Pasó de llamar traidora a Boluarte a ser parte del soporte que ella recibe. Una conducta absolutamente oportunista que busca la sobrevivencia, la prebenda y la posibilidad de tener cierta influencia en niveles del poder”, explicó.

Mientras tanto, Cerrón lideró su partido y la bancada a la par que se defendía de acusaciones en su contra por colusión, negociación incompatible, presunta organización criminal y otros delitos.

Pero la semana pasada, la Sala Penal de Apelaciones Transitoria Especializada en Delitos de Corrupción de Junín lo condenó a tres años y seis meses de prisión efectiva por el Caso Aeródromo Wanka, y escapó de la justicia.

ESTOS SON LOS CASOS CONTRA CERRÓN:

Con ese escenario, en opinión de Zavaleta, Perú Libre desaparecerá como otros partidos que llegaron al poder. “No existen Perú Posible, el Partido Nacionalista, Peruanos por el Kambio, no existe el Apra políticamente”, dijo.

Pero Enrique Castillo señaló: “No diría que es un partido que está condenado a la desaparición. Diría que, como cascarón que es, estará sometido a los vaivenes de la coyuntura y de lo que signifique la posibilidad de reengancharse con algún discurso coyuntural, radical, temporal”.