Por lo general, el consumo de pan suele catalogarse como no saludable para las personas. Pero esto podría deberse a la levadura y harinas industriales que se utilizan para su preparación en la actualidad, pues existe una variedad del mismo que lleva miles de años con nosotros y que, además, otorga grandes beneficios para nuestra salud. Este manera de hacer el pan se está popularizando nuevamente gracias a que mejora nuestra salud intestinal y previene el envejecimiento celular. Descubre en esta nota de qué tipo de pan se trata y más sobre sus beneficios.
¿Cuál es la variedad de pan que otorga beneficios para nuestra salud?
Se trata del pan elaborado a base de la popularmente conocida como ‘masa madre’. Esta es una preparación que la humanidad habría descubierto 2,000 años antes de Cristo, tal como señalan estudios de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos. Lo que inicialmente surgió de la fermentación accidental de harina y agua se fue perfeccionando y llegando a cada vez más culturas.
En la actualidad, esta variedad está ganando una mayor popularidad entre las personas debido a que otorga un sabor y textura distintos a sus productos. Pero también gracias al impacto positivo que tiene un nuestro organismo. Muchos ya lo consideran como una gran alternativa para quienes quieren bajar de peso, disminuir sus niveles de glucosa en la sangre o para quienes son intolerantes al gluten.
¿Cuáles son los beneficios de la masa madre para nuestra salud?
Para empezar, es un alimento con una composición nutricional noble, pues ofrece 160 calorías y 32 gramos de carbohidratos en media rebanada. Asimismo, contiene una considerable cantidad de fibra vegetal en forma de prebióticos, microorganismos que estimulan el crecimiento de bacterias en la microbiota en el colón, mejorando así la salud intestinal y la digestibilidad.
Por otro lado, gracias a que es un alimento completamente orgánico y tiene un proceso de fermentación más lento, es un producto ideal para los intolerantes al gluten, pues lo descompone completamente. También es una gran fuente de vitaminas del grupo B, minerales como potasio, hierro, calcio, magnesio y zinc, todos nutrientes esenciales para el cuerpo.
¿Cómo se prepara la masa madre?
La preparación de la masa madre requiere tan solo dos ingredientes: agua y harina (que puede ser de cualquier cereal). Ambos se deben mezclar en un recipiente mediano y ancho en cantidades iguales. Luego, el recipiente se debe tapar y dejar reposar durante 24 horas a temperatura ambiente y alejado de corrientes de aire que puedan inhibir la fermentación.
Al día siguiente se debe agregar medio vaso de harina y medio vaso de agua, junto una cucharadita de azúcar para impulsar la fermentación. Este paso se debe repetir durante tres a cinco días, revisando que la masa adopte un aspecto cremoso y se formen burbujas en ella. Ahora sí, para utilizarla se debe separar solo un pedazo de ella, mientras el resto se debe seguir conservando.