No siempre es bueno tomar vitaminas: ¿en qué casos sí debo consumirlas? | Antes de llenar tu despensa con frascos de multivitamínicos, es importante conocer en qué situaciones específicas el consumo de vitaminas es realmente necesario. (Foto: Pixabay)
No siempre es bueno tomar vitaminas: ¿en qué casos sí debo consumirlas? | Antes de llenar tu despensa con frascos de multivitamínicos, es importante conocer en qué situaciones específicas el consumo de vitaminas es realmente necesario. (Foto: Pixabay)
Redacción EC

Aunque las suelen considerarse esenciales para mantener una buena salud, su consumo indiscriminado podría no ser tan beneficioso como parece. En ciertos casos, tomar suplementos vitamínicos podría ser innecesario e incluso contraproducente para tu bienestar, pero ¿cómo saber cuándo realmente las necesitas?

Antes de llenar tu despensa con frascos de multivitamínicos, es importante conocer en qué situaciones específicas el consumo de vitaminas es realmente necesario. Te contamos en qué casos deberías considerar tomarlas y cuándo es mejor confiar en una dieta equilibrada.

¿EN QUÉ CASOS SÍ DEBO CONSUMIR VITAMINAS?

El consumo de suplementos vitamínicos es necesario en casos específicos donde existe un riesgo de deficiencia comprobada o en situaciones especiales que afectan la salud de ciertas poblaciones. El Instituto Nacional para la Salud y la Excelencia Clínica británico (NICE) recomienda suplementos de ácido fólico para todas las mujeres que están pensando en tener un bebé y para aquellas que están embarazadas hasta la semana 12 del embarazo, ya que este nutriente es crucial para prevenir defectos del tubo neural en el feto. Además, se recomienda la vitamina D para todas las mujeres embarazadas y lactantes, los niños de seis meses a cinco años, las personas de 65 años o más, y aquellos que no están expuestos a suficiente luz solar, como personas que cubren su piel por razones culturales o que no pueden salir de casa durante largos periodos.

También se sugiere un suplemento que contenga vitaminas A, C y D para todos los niños de seis meses a cuatro años, ya que durante el crecimiento, es posible que no obtengan suficientes nutrientes, especialmente aquellos con dietas poco variadas. Esta recomendación se aplica como una medida preventiva para asegurar que los niños en desarrollo reciban los nutrientes necesarios para un crecimiento y desarrollo adecuados, particularmente en casos donde la ingesta alimentaria no cubra las necesidades diarias.

El consumo de suplementos vitamínicos es necesario en casos específicos donde existe un riesgo de deficiencia comprobada o en situaciones especiales que afectan la salud de ciertas poblaciones. (Foto: Istock)
El consumo de suplementos vitamínicos es necesario en casos específicos donde existe un riesgo de deficiencia comprobada o en situaciones especiales que afectan la salud de ciertas poblaciones. (Foto: Istock)

Es fundamental que los suplementos sean recomendados por un profesional de la salud, como un médico de cabecera, quien puede evaluar la necesidad específica basándose en la condición médica del individuo. En ciertos casos, los suplementos pueden ser indicados para corregir deficiencias nutricionales específicas o para manejar condiciones de salud que impidan la absorción adecuada de ciertos nutrientes. Por ejemplo, personas con enfermedades que afectan la digestión o la absorción, como la enfermedad celíaca o la enfermedad de Crohn, pueden beneficiarse de suplementos bajo la supervisión médica adecuada.

En general, si decides tomar suplementos, es esencial no exceder la Cantidad Diaria Recomendada (CDR) a menos que esté bajo la guía de un dietista registrado o un nutricionista clínico, ya que las dosis excesivas pueden ser perjudiciales. Es importante no confiar ciegamente en la publicidad de los productos y recordar que la creencia de que “más es mejor” no siempre es aplicable a los suplementos vitamínicos. Estos deben ser vistos como una medida complementaria y no como un sustituto de una dieta equilibrada y saludable.