Ambas nacieron, se formaron y saltaron a la fama en Nueva York (López en Bronx en 1969; Streisand en Brooklyn en 1942). Ambas lucharon contra la pobreza -y los prejuicios- sostenidas en su talento y en sus ganas de conquistar el mundo. Ambas son referentes en el cine, la música, la moda y los negocios. Ambas son -al mismo tiempo- el original y el estereotipo.
No es la primera vez que la diva de origen latino celebra lo mucho que admira a Barbra Streisand, principalmente por haber sido una de sus grandes inspiraciones al crecer como ejemplo de la artista que podía hacerlo todo: estar en la gran pantalla, cantar frente a cientos de miles de personas o producir sus propios discos y películas. Tal es la devoción de Jlo, que algunos años atrás consiguió enviarle un guión a la estrella de 77 años, prácticamente retirada del cine. Cuando Streisand la llamó para comentarle sus opiniones, López estaba tan nerviosa que le pidió a su manager que responda por ella. “Jennifer es demasiado buena para este material”, fue su respuesta, según contó la propia López a la revista Variety el año pasado.
El día en que las dos divas se reúnan puede no estar tan lejos, y las redes sociales bien pueden dar fe de ello. Hace unos días López colgó una foto luciendo algunas prendas de la colección Primavera/Verano 2020 de la marca Coach, de la cual es imagen oficial (a eso hay que sumarle su reciente fichaje por Versace). ¿Quién aparecía en el primer look de la cantante y protagonista de la cinta Hustlers? Pues la propia Streisand. Su rostro es obra del artista pop, colega de Andy Warhol e ilustrador de muchas portadas de la célebre revista Interview, Richard Bernstein y aparece en dos piezas clave: un sweater y una cartera que aún no están a la venta al público.
El detalle no ha pasado desapercibida para la diva de Brooklyn, que se mantiene muy activa en sus cuentas de Instagram y Twitter (en esta última se dedica casi enteramente a criticar a Donald Trump) y que ha compartido fotos de las mencionadas piezas desde que se presentaran en el desfile oficial, en setiembre de 2019.
El 21 de enero Jennifer López subió la foto luciendo el buscado sweater a su cuenta, donde reúne a más de 110 millones de seguidores. Las dos celebridades no dudaron en demostrarle a sus fans que la admiración es mutua: “¡Me encanta esto! Hola JLo, qué bonito verte usando mi cara”, escribió Barbra Streisand. “Sabes que eres mi ídolo”, contestó López. La campaña tiene como escenario lugares icónicos de Nueva York, como el High Line.
Desde entonces, otras celebridades se han dejado fotografiar usando el mismo look. Mila Kunis y Selma Blair llevan el sweater con unos jeans, casuales y muy relajadas, a diferencia de la combinación de López. Pero no son las primeras que han elegido el rostro de Barbra Streisand para adornar una prenda básica. El año pasado Miley Cirus compartió una foto en su cuenta de Instagram con una camiseta (posiblemente de las colecciones oficiales que se ponen a la venta en las giras de conciertos de Streisand) estampada con una foto de la década del noventa.
La colaboración de Coach con el artista Richard Bernstein también incluye piezas con los rostros de los actores Rob Lowe y Michael J Fox. De momento, son las prendas con Barbra Streisand las que ya se han convertido en objeto de culto sin estar aún disponibles. ¿El efecto López o el efecto Streisand?