¿Sabía usted que mientras duerme, su cerebro está pendiente de su entorno y de las personas que lo rodean? Pues bien, nuestro cerebro es el músculo más importante de nuestro cuerpo y nos protege incluso cuando estamos descansando.
LEE TAMBIÉN: ¿Por qué dormimos peor cuando nos hacemos mayores?
Así lo evidenciaron unos investigadores de la Universidad de Salzburgi, en Austria, que midieron la actividad cerebral de 17 voluntarios, entre ellos 14 mujeres, en respuesta a voces familiares y desconocidas.
Los resultados mostraron que, aunque estemos dormidos, el cerebro sigue pendiente del entorno para detectar posibles amenazas.
LEE TAMBIÉN: Las mascarillas en espacios públicos cerrados ya no serán obligatorias en gran parte de EE.UU.
El estudio indica que, aunque estemos descansando con los ojos cerrados, el cerebro continúa monitoreando el entorno, equilibrando la necesidad de proteger el sueño con la necesidad de despertar.
Se puede atribuir a esta habilidad el largo proceso de la evolución humana y la necesidad de despertar rápidamente ante posibles peligros de señales auditivas que no nos son familiares.
¿Cómo se realizó el estudio?
El estudio fue publicado en la revista especializada en neurociencia JNeurosci. Los investigadores reclutaron a 17 adultos con una edad promedio de 22 años. Ninguno tenía trastornos del sueño.
A la hora de acostarse, recibieron un equipo de polisomnografía, unos chupones que están conectados a una máquina para medir la actividad cerebral, la respiración, la tensión muscular, la actividad cardiaca, entre otras.
Los voluntarios estuvieron conectados a esta máquina durante toda la noche. Antes del experimento, se les aconsejó a los participantes que mantuvieran un ciclo regular de sueño y vigilia durante al menos cuatro días.
Mientras los voluntarios dormían, se les presentaron estímulos auditivos a través de altavoces. Estos pronunciaban el nombre de la persona y dos nombres desconocidos.
Los nombres eran pronunciados por una voz familiar y una voz que ellos no conocían.
Resultados
Las voces desconocidas activaron en los participantes el complejo K, un tipo de onda cerebral vinculada a las perturbaciones sensoriales, en mayor medida que en el caso de las voces familiares.
La reacción a las voces desconocidas iba acompañada de cambios a gran escala en la actividad cerebral relacionada con el procesamiento sensorial. Durante la noche, y a medida que las voces se repetían, el cerebro iba haciendo cada vez más familiar la voz no conocida.
El estudio mostró que el cerebro tiene la capacidad de seguir aprendiendo mientras permanece dormido. Los complejos K le permiten al cerebro entrar en un ‘modo de procesamiento centinela’ que permite conservar la capacidad de responder a los estímulos relevantes así esté dormido.
“Puede ser que el cerebro durmiente aprenda, a través de un procesamiento repetido, que un estímulo inicialmente desconocido no representa una amenaza inmediata para el durmiente y, en consecuencia, disminuye su respuesta. Por el contrario, en un entorno de sueño seguro, el cerebro podría estar esperando escuchar voces familiares e inhibe constantemente cualquier respuesta a tales estímulos para preservar el sueño”, afirmaron los expertos en la revista JNeurosci.
Esta investigación nos ayuda a entender un poco más nuestro cerebro y descubrir que, incluso estando dormidos, podemos reconocer voces y estar alerta en caso de que algo suceda.
El Tiempo, Colombia/GDA
VIDEO RELACIONADO
TE PUEDE INTERESAR:
- ¿Por qué dormimos peor cuando nos hacemos mayores?
- El ADN revela cómo vivían los primeros humanos en África
- Las mascarillas en espacios públicos cerrados ya no serán obligatorias en gran parte de EE.UU.
- Sanciones de EE.UU. a Rusia no afectan por el momento a su colaboración en la Estación Espacial
- El mayor árbol genealógico de la historia revela cómo se relacionan todos los individuos del mundo
- Colombia elimina el uso de mascarillas en espacios abiertos: ¿qué dice la ciencia?
Contenido sugerido
Contenido GEC