El equipo robótico competirá en Estados Unidos para ser enviado en una misión espacial. (Foto: Andina)
El equipo robótico competirá en Estados Unidos para ser enviado en una misión espacial. (Foto: Andina)
Redacción EC

Un equipo de estudiantes de la (UNI) diseñó un , o vehículo de exploración espacial (CanSat Rover), para representar al Perú en el concurso ARLISS 2023, que se desarrollará del 10 al 15 de septiembre en Estados Unidos.

Los alumnos del Laboratorio Smart Machines del Centro de Tecnologías de Información y Comunicación (CTIC) de la UNI trabajaron el prototipo de CanSat Rover, que cuenta con avanzados sensores.

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El robot CanSat hecho por los estudiantes de la UNI -del tamaño de una lata de gaseosa- competirá contra los prototipos desarrollados por los universitarios de todo el mundo que participan del programa científico, promovido por la Association of Experimental Rocketry of the Pacific (AeroPac) y ARLISS.

Este dispositivo de tecnología espacial tiene menos de 6 pulgadas de diámetro y deberá superar una exigente prueba en el desierto Black Rock de Nevada. Será lanzado al espacio en un cohete proporcionado por AeroPac.

El robot cuenta con avanzados sensores que le permitirán trabajar en el espacio. (Foto: Andina)
El robot cuenta con avanzados sensores que le permitirán trabajar en el espacio. (Foto: Andina)


Misión que debe superar el Cansat Rover

Juan Ynsil Alfaro, gestor de equipo, indicó que el robot cuenta con sensores que indican su posición, así como permiten recopilar información como la presión o la temperatura. También posee un giroscopio y magnetómetro.

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“La idea es que, desde una estación en la Tierra, se le pueda enviar comandos para que vaya a una coordenada, y que el robot llegue a ese punto. Eso ya se ha logrado en las pruebas”, manifestó. El rover funcional ha sido mejorado en las últimas semanas para el próximo reto: la simulación de una exploración espacial en un ambiente árido.

“Se utiliza el cohete para lanzar el rover, y luego desciende. La caída es amortiguada por un paracaídas, y aquí entra el área de mecánica”, precisó el estudiante de ingeniería mecánica. Al estar en Tierra nuevamente, no solo debe “sobrevivir”, también completar su misión al cumplirse el comando.

Michaelly Gonzales Asencios, encargada del área de mecánica del proyecto, explicó que también se recopilarán datos durante este proceso, a través de los sensores equipados al Canstar Rover.

En total, son tres misiones: 1) que se active el sistema en su llegada a Tierra, 2) que recolecte datos y 3) que llegue a la meta. “Tiene un mecanismo que facilita que se desprenda el paracaídas al caer nuevamente a la Tierra”, dijo Gonzales, estudiante de ingeniería mecánica.


Para eso, los estudiantes de la UNI han programado al robot para que, apenas aterrice, se libere voltaje con el fin que se rompa el hilo de nylon que lleva el paracaídas. Las ruedas soportan cualquier tipo de terreno árido, incluso si tienen curvaturas. El prototipo de este rover ha sido trabajado y mejorado, año a año, por los estudiantes del Laboratorio de Smart Machines desde el 2018.


Fuente: Andina


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